Por Doug Palmer
WASHINGTON (Reuters/EP) - Estados Unidos saludó el viernes la decisión de Pekín de eliminar aranceles adicionales sobre partes de autos importadas, después de que China perdió una disputa sobre el tema en la Organización Mundial del Comercio.
"Nos sentimos complacidos de que China nos haya informado que va a eliminar los cargos adicionales sobre importaciones de partes de autos en respuesta al dictamen de la OMC. Esperamos revisar cuidadosamente los cambios anunciados por China", dijo el representante de Comercio estadounidense, Ron Kirk, mediante un comunicado.
"Terminar con estos cargos ayudará a asegurar un campo de juego nivelado para las partes de autos de alta calidad fabricados en Estados Unidos, y es un ejemplo importante de la importancia de reforzar nuestros derechos de acuerdos de comercio internacionales", declaró Kirk.
La medida china de acatar la resolución de la OMC en el caso de partes de autos se produce semanas antes de que se le pida al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que tome una decisión el 17 de septiembre sobre si restringir importaciones de neumáticos hechos en China en un caso presentado por trabajadores sindicalizados.
Si Obama acepta eso podría sentar el escenario para que China presente su propia queja en la OMC.
El caso de las piezas de automóviles data de marzo del 2006, cuando el Gobierno del ex presidente estadounidense George W. Bush estaba presionado por los demócratas para demostrar su seriedad a la hora de asegurar que Pekín estaba cumpliendo con las promesas que realizó cuando se unió a la OMC en diciembre del 2001.
Como parte de su ingreso, China acordó rebajar las barreras comerciales que afectaban las importaciones de autos y sus partes.
No obstante, posteriormente adoptó regulaciones que aplicaron un cargo adicional en las piezas de autos importadas cuando éstas eran incorporadas a un vehículo ensamblado final que no cumplía con ciertos requerimientos de contenido local, dijo la representación comercial estadounidense.
Todos los fabricantes de autos en China que importaban partes de autos además tuvieron que registrarse en la Administración Aduanera China y entregar información específica acerca de cada vehículo que ensamblaron, incluyendo una lista de las partes importadas y nacionales que serían usadas.
Si el número o valor de las piezas importadas en el auto armado excedía los umbrales especificados, las autoridades chinas imponían un impuesto de un 25 por ciento a cada una de las partes importadas.
Los aranceles representaban una discriminación injusta contra las autopartes importadas y ponían una presión significativa sobre los productores de piezas de autos para que llevasen sus instalaciones de manufactura a China, dijo la oficina del representante de comercio estadounidense.