Actualizado 17/07/2009 01:35

ENTREVISTA-Ministro de Francia fija nuevas metas sobre déficit

Por Tamora Vidaillet y Jean-Baptiste Vey

PARIS (Reuters/EP) - Francia apunta a reducir su déficit público al límite de 3 por ciento establecido en las reglas de la Unión Europea para el año 2013 o 2014, dijo a Reuters el jueves el ministro de Presupuesto, Eric Woerth.

Si bien es difícil calcular el tiempo de recuperación, Francia también espera reducir su déficit en un punto del Producto Interno Bruto por año una vez que mejore su condición económica, dijo en una entrevista transmitida en la televisión de Reuters Insider.

"Cuando la economía se recupere, el objetivo al que el Gobierno y yo estamos apuntando es reducir el déficit público en un punto del PIB al año", señaló.

En conjunto con otros países, Francia ha aumentado sus gastos para hacer frente a las peores condiciones económicas en décadas.

El mes pasado Francia desestimó cumplir con una meta anterior para reducir su déficit por debajo del umbral de 3,0 por ciento en el 2012 y pidió una interpretación más relajada de las normas de presupuesto de la UE.

El Gobierno también aumentó sus pronósticos para el déficit del país, que alcanzó un 3,4 por ciento del PIB el año pasado, a entre 7,0 y 7,5 por ciento en el 2009 y 2010.

Aunque ha dicho que el déficit sería de ente 5,0 y 5,5 por ciento del PIB en el 2012, no ha establecido un marco temporal para retornar a la marca simbólica de 3 por ciento.

Sin embargo, la estrategia de Francia para retomar dicho nivel deberá depender de una mezcla entre el fin del gasto en estímulo económico, un alzo de los ingresos por impuestos cuando regrese el crecimiento y redoblar los esfuerzos para reducir los gastos de los Gobiernos locales.

Pero antes de que la recuperación entre en camino, Woerth reconoció que el 2010 será un año difícil en materia de desempleo, el cual se espera siga al alza incluso una vez que la economía muestre señales claras de estabilización.

La situación del desempleo sólo mejoraría en el 2011, afirmó.

A pesar de los niveles al alza en la deuda, los cuales Woerth describió como "problemáticos", no hubo indicios de alarma entre los inversionistas o las agencias calificadoras de crédito sobre la evaluación de la deuda del país.

Los propios analistas han dicho en reiteradas ocasiones que el alza en la deuda y el déficit no son obstáculos para que Francia recaude dinero en los mercados de capital.

El Gobierno ha dicho que espera que su deuda alcance un 77 por ciento del PIB en el 2009 y 88 por ciento en el 2012, bastante más que el límite de 60 por ciento de la UE.