Por Patrick Markey
BOGOTA (Reuters/EP) - El Senado de Colombia aprobó esta semana el texto de un referendo para consultar a los votantes si aprueban cambiar la Constitución y permitir al presidente Alvaro Uribe aspirar a un tercer mandato consecutivo a partir del 2010.
El proyecto enfrentará una dura prueba la semana entrante cuando inicie el trámite para su aprobación en la Cámara de Representantes, luego de lo cual también deberá afrontar un análisis de legalidad por parte de la Corte Constitucional.
Los críticos de la iniciativa dicen que un segundo cambio en la Constitución para permitir que Uribe aspire nuevamente a la presidencia golpeará las instituciones y desequilibrará la balanza de los poderes públicos.
El tiempo apremia para el referendo, dado que las elecciones presidenciales se harán en mayo próximo. Uribe, el más firme aliado de Estados Unidos en América Latina, ha emprendido una ofensiva contra la guerrilla izquierdista, replegándola a las selvas del país.
Aunque no ha hecho público abiertamente su deseo de presentarse nuevamente, Uribe ha dicho que a lo que aspira es a la reelección de su política de seguridad y la estrategia económica basada en un fuerte impulso a la iniciativa privada, de la que ha cosechado frutos, en parte, por medidas poco amistosas emprendidas por sus vecinos Venezuela y Ecuador.
A continuación los posibles escenarios para la reelección de Uribe, en un horizonte nada claro:
REFERENDO ES APROBADO EN EL CONGRESO, ENFRENTA A LA CORTE Y
AL ELECTORADO
La votación en la Cámara de Representantes se hará el martes y es el último paso que debe dar en el Congreso.
Se necesitará la aprobación de 84 legisladores de los 166 que componen la Cámara de Representantes para que el proyecto pase.
"Trabajaremos para ganar y si pasa, hay tiempo para que suceda", dijo el legislador pro gubernamental Oscar Arboleda.
La Cámara ya había aprobado un texto del referendo, pero para que Uribe se presente en las elecciones del 2014, mientras que el Senado lo había aprobado desde el 2010.
Una comisión especial tuvo que conciliar ambos textos aprobados, pero prevaleció el que salió del Senado, por lo que la Cámara no estaría muy inclinada a hacerlo el próximo martes.
Un ingrediente adicional que pesaría sobre un posible voto negativo es que muchos congresistas están demandados ante la Corte Suprema, acusados de cometer irregularidades en la primera votación.
Pero si llega a pasar en la Cámara, nadie garantiza que lo haga en el análisis de legalidad que obligatoriamente debe hacerle la Corte Constitucional, o que el mandatario obtenga el 25 por ciento del electorado que ordena la ley para cambiar la Constitución.
Uribe mantiene un elevado nivel de popularidad, pero su Gobierno ha sido afectado por escándalos de corrupción, el elevado desempleo y el estancamiento de la economía. Otras investigaciones sobre irregularidades del referendo y su financiación también podrían entorpecer su avance.
Pero lo más complicado es el tiempo. La Corte podría tomarse al menos dos meses para analizar el texto que salga del Congreso y las autoridades electorales también estarían presionadas para organizar la votación.
Partidarios de Uribe creen que el referendo podría convocarse para febrero o marzo.
CAMARA RECHAZA EL PROYECTO Y ARRANCA LA CARRERA ELECTORAL
En el Congreso podría morir el proyecto, con lo que no quedarían oportunidades allí para que Uribe se presente a una reelección inmediata.
Aunque el Gobierno puede explorar otras alternativas, es mucho más probable que una derrota en el Congreso despeje la carrera electoral hacia la presidencia.
Ningún candidato ha emergido con fuerza, en parte esperando a que Uribe haga un guiño hacia alguno de sus seguidores, quienes han prometido seguir su política de seguridad y de impulso a la inversión privada.
El anterior ministro de Defensa de Uribe, Juan Manuel Santos, fue el principal ejecutor de la política de seguridad; pero el ex alcalde de Medellín, Sergio Fajardo, ha ganado terreno en las encuestas como un candidato independiente.
La ex embajadora en el Reino Unido Noemí Sanín ha hecho clara su intención de postularse, aunque no ha definido una representación política.
URIBE LOGRA EL RESPALDO DEL CONGRESO, PERO DA PASO AL
COSTADO
Uribe dice que desea garantizar la continuidad de sus políticas fuertemente respaldadas por Estados Unidos para derrotar a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y obligarlas a ir a una mesa de negociaciones de paz.
Pero sus críticos creen que el conflicto interno de más de cuatro décadas podría traspasar los Andes si decide continuar su mandato.
Incluso, muchos admiradores le sugieren dar un paso al costado para tener un rostro fresco al frente del país, pero creen que podría estropear los progresos hechos.
Uribe ha dicho que podría dejar despejado el camino para que alguno de los nuevos líderes continúe sus políticas. Esa opción podría evitar el impacto de una posible derrota en el análisis de legalidad que haga la Corte Constitucional.
URIBE NO LOGRA EL RESPALDO DE LA CAMARA, SUS ALIADOS
ANALIZAN ALTERNATIVAS
Pero aún hay opciones que se exploran.
Una de ellas es que se convoque a una Asamblea Constituyente, que de hecho ha sido sugerida por muchos de los "uribistas", para que directamente haga la enmienda y permita la reelección inmediata del mandatario.
La otra opción es una votación especial convocada por el presidente por razones de interés nacional. Pero prácticamente no habría tiempo para organizar el montaje de esa consulta popular, permitida por la Constitución, antes de las elecciones de mayo.
"El tiempo no permite que alguna de esas opciones salga adelante", dijo el ex ministro Jaime Castro, actual profesor de derecho constitucional. "Los cogió la noche", puntualizó.