Actualizado 10/11/2006 00:10

Honduras.- El Gobierno de Zelaya anuncia la intervención fiscal de una empresa cementera de capital francés

TEGUCIGALPA, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno del presidente Manuel Zelaya decidió hoy intervenir la empresa cementera Lafarge-Incehsa, de capital francés, por su negativa a eliminar la subida de 0,24 céntimos de euro en el precio de la bolsa de cemento gris. La acción la llevarán a cabo los auditores de la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI).

El viceministro de Comercio Interior, Fredy Cerrato, había anunciado este martes que la cementera sería intervenida por su reticencia a anular el aumento de 6,39 lempiras (0,24 céntimos de euro) a la bolsa de cemento gris, en vigencia desde el miércoles anterior, informa hoy el diario hondureño 'La Prensa'.

"El Gobierno, a través de la Dirección Ejecutiva de Ingresos, intervendrá fiscalmente" a la empresa Lafarge-Incehsa, dijo hoy (en la madrugada de hoy en España) en rueda de prensa el viceministro de Comercio, Fredy Cerrato.

La medida comprende "empezar una auditoría que implica la revisión de costos, una revisión exhaustiva en el aspecto contable para determinar sus utilidades y determinar exactamente cual es la situación financiera de la empresa", añadió.

Además, el Gobierno ordenó que Incehsa debe volver al precio de 97 lempiras la bolsa de ese material de construcción. Ayer fue el tercer día de negociaciones, pero no hubo acuerdo con el gerente de Ventas, Darío Mencía. La Industria Cementera Hondureña sorprendió el pasado miércoles cuando anunció que el precio de ese material subía de 97 a 104 lempiras.

El anuncio estatal ocurrió hoy pocas después de una reunión entre el Gobierno y representantes de Lafarge, quienes según Cerrato abandonaron las negociaciones.

La determinación del Gobierno es apoyada por diputados de diferentes partidos políticos e incluso el presidente del congreso Roberto Micheletti dijo que se analiza liberar el ingreso de cemento de vecinos centroamericanos.

Los ejecutivos de la cementera justificaron el aumento en el incremento del precio del carbón el pecoque, materias primas para mover los molinos de cemento.

Sin embargo, el sector de la construcción y la población en general cuestionaron esa medida, por el fuerte impacto en el precio de la construcción de las 1.000 viviendas que se están levantando para solucionar el déficit habitacional de Honduras.

La amenaza del Gobierno de aplicar una intervención fiscal a Incehsa si no anula el aumento de 6.39 lempiras al cemento gris ha provocado la alarma de la empresa privada del país.

Los empresarios respondieron hoy que harán prevalecer lo establecido en la Ley de Inversión de Honduras, donde se asegura que el Gobierno reducirá al mínimo su intervención en la actividad económica.

El ex secretario de Finanzas, Willian Chong Wong, mencionó que "es totalmente ilegal intervenir una compañía en cualquier momento, va en contra de la libre empresa".

El ex funcionario explicó que cualquier auditoría del Gobierno debe estar a cargo de la DEI, "una empresa tiene 30 días para impugnar una acción, apelarla y llegar hasta la Corte Suprema de Justicia, siempre que hay una prueba para realizar un reparo".

El experto en derecho mercantil, Enrique Rodríguez, "primero hay que definir y diferenciar dos conceptos, la intervención fiscal es para verificar la correcta tributación de las empresas, pero debe hacerse a través de la DEI. Una auditoría puede ser solicitada por una sociedad mercantil, los socios de la empresa y tiene por objeto verificar la correcta ejecución de la administración de los mismos, pero sólo puede ser la entidad mercantil", aseveró.

El Grupo Lafarge-Incehsa aumentó desde el primero de noviembre el costo de la bolsa de cemento gris de 45,5 kilos y no retrocedió a su decisión pese a las repetidas peticiones del Gobierno y sectores populares del país.

El Gobierno vendió Incehsa a los militares en 1990 por 30 millones de dólares. Las fuerzas armadas, a su vez, vendieron el 43,41% de las acciones de la cementera en febrero de 1998 a Lafarge, líder mundial de materiales de construcción, a fin de competir mejor a nivel internacional, lo que no han hecho hasta ahora.

La empresa cuenta con 700 empleados y produce el 50 por ciento del cemento de Honduras. Su competidora única es Cementos del Norte, que en 1997 vendió el 16 por ciento de sus acciones a la mexicana Apasco. afarge-Asland de Francia opera en 45 naciones y tiene subsidiarias en Brasil y Venezuela.