La eléctrica confía en que el "veedor" de Argentina en su filial sirva para mostrar los problemas del sector
MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
Endesa ha emprendido un proceso de reestructuración de su negocio en Iberoamérica que se articulará a través del incremento de capital en la filial chilena Enersis y cuyo objetivo es consolidar una plataforma de inversión en la región, anunció el consejero delegado de la compañía, Andrea Brentan, en una conferencia con analistas.
El aumento de capital servirá para que la compañía traspase las participaciones directas de Endesa Latinoamérica a la filial chilena e incluirá una aportación de los accionistas minoritarios de Enersis, en la que la eléctrica tiene un 60%, de hasta 3.158 millones de dólares (2.588 millones).
Brentan explicó que de esta forma se mejorará la visibilidad del negocio en la región y se "optimizará su valor", al tiempo que se captan recursos adicionales para financiar las inversiones en la región.
La compañía dispone de una cartera de proyectos por 5.200 megavatios (MW) en el continente y considera que la nueva estructura de su negocio le permitirá participar en mejores condiciones en operaciones de fusión y adquisición. Además, ganará "masa crítica" como operador de referencia en Iberoamérica.
El próximo 13 de septiembre, la junta general de accionistas de la filial chilena de Endesa aprobará la ampliación de capital, cuyo valor máximo será de 8.020 millones de dólares (6.573 millones de euros).
"VEEDOR" EN ARGENTINA
Por otro lado, Endesa confía en que el "veedor" designado por el Gobierno argentino para fiscalizar la actividad de la filial Edesur sirva para que las autoridades del país puedan conocer las medidas necesarias para resolver el déficit de retribución que sufren las empresas del país.
"El veedor no implica una intervención del Gobierno, sino que debería acelerar el proceso para que el Ejecutivo pueda conocer las medidas necesarias" para acabar con los problemas del sector en el país, indicó el consejero delegado de Endesa.
La eléctrica, que registró un beneficio bruto de explotación (Ebitda) negativo de 4 millones de euros en Argentina en el primer semestre, advierte de que en el país se ha producido un "empeoramiento de la situación por un entorno regulatorio insostenible".