Publicado 21/01/2014 15:08

Importación china de oro podría caer al calmarse fuertes compras


SINGAPUR/LONDRES, 21 ene, 21 Ene. (Reuters/EP) -

- Las importaciones chinas de oro, el único punto positivo de un 2013 que fue desastroso para el lingote, parecen encaminadas a caer frente a los niveles sin precedentes del año pasado, lo que refuerza la presión sobre el metal precioso mientras analistas pronostican una baja en los precios por segundo año.

Sin embargo, la caída en la demanda china sería limitada debido al derrumbe del 28 por ciento en el precio del oro en el 2013, que ha mantenido un fuerte interés de compradores minoristas en el principal consumidor mundial del metal, pese a que inversores grandes buscan una mayor rentabilidad en otra parte.

Inversores chinos se apuraron para comprar oro el año pasado, particularmente después de una caída en los precios en abril que generó filas de pequeños compradores que buscaban precios accesibles.

En lo primeros 11 meses del 2013, las importaciones se duplicaron con creces a 1.060 toneladas, en base a los datos más recientes, lo que representó alrededor de un tercio de las compras globales.

No obstante, las importaciones de oro de China desde Hong Kong -los únicos datos oficiales disponibles- podrían caer en el 2014, dijeron cuatro analistas, tres de los cuales estimaban una disminución de por lo menos un 10 por ciento.

Otro vio importaciones cerca del mismo nivel de hace un año.

"Creo que tal vez una cifra que baje de un 10 a 15 por ciento interanual probablemente sea más o menos correcta para las importaciones chinas de oro. Hay un buen nivel de existencias allí que pueden ser liberadas al mercado de joyería", dijo Tom Kendall, jefe de investigación en metales preciosos de Credit Suisse.

El oro se derrumbó en el 2013 después de una tendencia de 12 anos mientras señales de una recuperación global llevaban a inversores occidentales a vender sus tenencias en busca de rentabilidades más altas, a la vez que la demanda del segundo mayor consumidor, India, era recortada por restricciones gubernamentales a la importación.

Sin embargo, con precios que rondaban niveles vistos por última vez en el 2010, los compradores minoristas se apuraron a comprar suministros, lo que redujo inventarios en bancos chinos y joyerías, que se vieron forzados a hacer reposiciones más tarde en el año.

La demanda también fue impulsada por un crecimiento dramático en el número de nuevas tiendas mayoristas, señaló Robin Bhar, analista de metales de Société Générale.

Sin embargo, al calmarse el impulso en la demanda y al concluir las reposiciones, observadores del mercado prevén que el ritmo de las compras se ralentizará.

"Es improbable que la demanda china en 2014 llegue al nivel del 2013, y menos que se expanda a su ritmo de crecimiento usual el año próximo", dijo Bhar.