Por Ellen Freilich
NUEVA YORK, 11 oct, 11 Oct. (Reuters/EP) -
- Los rendimientos de las notas del Tesoro de Estados Unidos con vencimiento a fines de noviembre y diciembre treparon el viernes, puesto que los inversores temían que un eventual acuerdo en el Congreso para elevar la autoridad de endeudamiento del país sólo aplace el riesgo de un default.
Los incrementos en los precios de deuda a largo plazo se desvanecieron el viernes debido a que el mercado se tranquilizó antes de un fin de semana largo.
Parte de la tendencia se debió a los esfuerzos del presidente Barack Obama y de congresistas republicanos para permitir una reapertura del Gobierno federal y aumentar el límite de deuda de Estados Unidos a corto plazo.
"El mercado de bonos se mantiene en un rango ajustado", dijo Daniel Heckman, estratega de renta fija del Bank Wealth Management en Kansas, Misuri.
En un aspecto favorable para el mercado de deuda del Gobierno estadounidense, las subastas de papeles del Tesoro a tres, 10 y 30 años de esta semana tuvieron una sólida demanda.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro a corto plazo han trepado esta semana en momentos en que bancos, fondos de dinero y otros evitan deuda que vence o tiene pagos de cupones previstos en la zona de peligro, cuando Estados Unidos se quedaría sin fondos si no se eleva el límite de la deuda.
El viernes, esas preocupaciones se extendieron cada vez más a bonos del Tesoro que vencen a fines de noviembre y en diciembre, cuando el techo de la deuda volverá a ser un problema si el Gobierno acuerda aplazar el álgido debate para incrementar la autoridad a dentro de unas seis semanas.
Los rendimientos de bonos del Tesoro que vencen el 29 de noviembre treparon a 0,18 por ciento el viernes, por encima de 0,12 por ciento el jueves y 0,05 por ciento el miércoles.
Los retornos en bonos del Tesoro que vencen el 7 de noviembre cotizaron a 0,26 por ciento el viernes, sin cambios respecto al cierre del jueves. La cifra permanece con un alza significativa frente a inicios de mes, antes de que se intensificaran las preocupaciones sobre un default.
Los bonos referenciales a 10 años no vieron cambios en su valor y ofrecieron un rendimiento de 2,68 por ciento. Los bonos del Gobierno a 30 años bajaron 1/32 en precio y arrojaron una rentabilidad de 3,74 por ciento.