Actualizado 20/06/2014 23:44

Inversores demandan bonos argentinos por expectativas de pago

Por Davide Scigliuzzo

NUEVA YORK, 20 jun, 20 Jun. (Reuters/EP) -

- Inversores especializados en deuda incumplida y en situaciones especiales han estado adquiriendo bonos argentinos en moratoria de pago, con la idea de sacar ventaja de algún arreglo eventual entre el país y sus acreedores no reestructurados, conocidos en inglés como "holdouts".

Sus inversiones recibieron un impulso el viernes, cuando la presidenta Cristina Fernández de Kirchner dijo que negociará con los acreedores, lo que hizo que los títulos "Discount" de la deuda reestructurada subieran unos siete puntos a 83,00 de su valor nominal.

Si bien los precios de los bonos reestructurados han visto oscilaciones dramáticas esta semana a medida que los inversores reaccionaban a los últimos giros de la prolongada disputa, la deuda no reestructurada se ha mantenido estable, aunque en algunos casos aumentó 20 puntos.

Los bonos argentinos que no fueron canjeados por valores nuevos durante las reestructuraciones del 2005 y 2010 suelen ser difíciles de conseguir.

Muchos fueron emitidos en Gran Bretaña, Alemania e Italia antes de la depresión e incumplimiento de pagos que sufrió Argentina a comienzo de la década pasada.

"Hemos estado buscando con esfuerzo las notas soberanas argentinas no reestructuradas", dijo Michael Roche, estratega de mercados emergentes de la firma de inversión The Seaport Group.

"Alguna está en manos de inversores que no están organizados. Alguna hasta fue olvidada", agregó.

El mayor precio, para un bono con plazo en noviembre del 2002 y cupón de 10,5 por ciento, originalmente emitido en marcos alemanes y ahora denominado en euros, se cotizó el viernes en 78 puntos de su valor nominal, dijo Roche.

Los bonos no reestructurados emitidos bajo ley de Nueva York son los que cotizan a precios más altos, seguidos por los emitidos bajo las leyes británica, alemana e italiana.

Las notas emitidas bajo ley de Nueva York son las que más se beneficiarían directamente de un arreglo en la disputa entre Argentina y los holdouts, mientras que el destino de los bonos emitidos en otras jurisdicciones no está muy claro.

"Algunos de los bonos pueden haber quedado olvidados bajo el sofá, pero lo que entendemos es que virtualmente todos los bonos bajo ley de Nueva York son objeto de las causas ante (el juez Thomas) Griesa", dijo Henry Weisburg, socio del bufete de abogados Sherman & Sterling.

Los compradores de deuda en problemas, no obstante, están apostando de que si Argentina es forzada a una nueva reestructuración, tendrá que negociar con inversores no reestructurados en todas las jurisdicciones.

"Creemos que el diferencial de precios debido a las leyes que rigen los valores se reducirá, porque Argentina probablemente querrá cerrar el capítulo de toda la deuda no reestructurada", dijo Roche.

La recompensa puede ser enorme. Asumiendo que un acuerdo con los holdouts incluya 25 por ciento de efectivo y un 75 por ciento de nuevos bonos de emisión local a un precio de 85 centavos por cada dólar, los papeles no canjeados pueden valer hasta 88 centavos, dijo Roche.

Eso deja aún un considerable margen de subida para deuda no canjeada, incluso tras las recientes alzas.

(Por Davide Scigliuzzo; Editado en español por Javier López de Lérida. LEA)