Por Fredrik Dahl y Hossein Jaseb
TEHERAN (Reuters/EP) - El influyente ex presidente iraní Akbar Hashemi Rafsanjani acató los lineamientos del Líder Supremo Ayatollah Ali Khamenei, cinco semanas después de que desafiara la autoridad de la figura más poderosa del país.
Rafsanjani, rival del presidente Mahmoud Ahmadinejad que el mes pasado se opuso el mes pasado a un llamado de los clérigos de línea dura de respaldar el polémico resultado de los comicios de junio, también abogó por medidas para promover una mayor unidad nacional, reportó la agencia oficial de noticias IRNA.
La conciliatoria declaración del sábado parecía contrastar con un duro sermón de Rafsanjani realizado a mediados de julio, cuando declaró que la república islámica estaba en crisis y demandó el fin de las detenciones de los moderados tras la elección.
Poco después de un sermón de oración del viernes, 50 miembros de la poderosa Asamblea de Expertos de 86 asientos lo llamaron a mostrar más apoyo a Khamenei, que aprobó la reelección de Ahmadinejad en la elección presidencial, la que según los reformistas fue arreglada.
Los comicios y sus turbulentas consecuencias hundieron a Irán en su peor crisis política desde la revolución islámica de 1979, exponiendo las profundas divisiones dentro de su elite gobernante y endureciendo las relaciones con las potencias de Occidente.
Rafsanjani, veterano de la revolución, respaldó al moderado Mirhossein Mousavi en la elección. Rafsanjani lidera la Asamblea de Expertos, un ente regulador constitucional que en teoría podría destituir al líder, así como el órgano arbitral Consejo de Conveniencia.
"El jefe del Consejo de Conveniencia del Estado hizo referencia a la observancia de los lineamientos fijados por el Líder Supremo, y enfrentar a los infractores, como una necesidad bajo las condiciones actuales", reportó IRNA.
Según la agencia, Rafsanjani dijo que "aquellos que controlan los podios, la influencia y los medios deben evitar conmovedores cismas (...) y tomar medidas para la creación de la unidad".
Irán arrestó a miles de personas como enérgica medida contra las manifestaciones opositoras que surgieron después de la elección del 12 de junio.
Cientos de opositores, entre ellos prominentes reformistas, siguen en prisión.
DAÑO A INDUSTRIA PETROLERA
En tanto, Mahmoud Ahmadinejad presentó su propuesta de nuevo gabinete al Parlamento, que debe aprobar a sus ministros, pero enfrenta una dura batalla para asegurar que la asamblea lo apoye en lo que es considerado una prueba de su poder.
De hecho, algunos importantes clérigos iraníes quieren que el presidente reconsidere la nominación de tres mujeres como ministras de su nuevo Gobierno, dijo el sábado un legislador conservador.
Los comentarios de Mohammad-Taqi Rahbar, quien encabeza la facción de clérigos de la asamblea, dieron cuenta de las dificultades que podría enfrentar el presidente para asegurar el apoyo parlamentario a su propuesta.
El vicepresidente de la asamblea, Mohammad Reza Abonar, ya ha advertido que algunos de los 21 miembros del gabinete podrían no ser ratificados.
Otro diputado, jefe de la comisión de energía del Parlamento, expresó su preocupación por las capacidades del propuesto ministro de Petróleo y advirtió de "daños irreversibles" para la industria, según un artículo de un diario del sábado.
La legislatura está dominada por los conservadores, pero algunos de los partidarios de la línea dura de Ahmadinejad lo abandonaron tras la elección. Sin embargo, aún goza del respaldo del Líder Supremo Ayatollah Ali Khamenei, la máxima autoridad de Irán. Los moderados consideran al próximo Gobierno de Ahmadinejad como ilegítimo.
La propuesta de Gabinete presentada por el presidente el miércoles también ha generado controversia en el extranjero.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina condenó la nominación de Ahmad Vahidi como ministro de Defensa, y dijo que era "una afrenta para las víctimas" del ataque contra un centro judío de Buenos Aires en 1994 en el que murieron 85 personas.
Argentina acusa a Vahidi de participar en la planificación del ataque. Irán ha negado repetidas veces algún vínculo con el atentado explosivo. Vahidi es viceministro de Defensa del actual Gobierno.
Ahmadinejad también nominó a mujeres como ministras de Salud, Bienestar Social y Educación, las primeras mujeres nominadas para secretarias de Estado en la conservadora república islámica.
Pero Rahbar dijo que muchos clérigos importantes "tienen dudas sobre elegir ministras mujeres y quieren que Ahmadinejad lo reconsidere", reportó Press TV en su sitio web en inglés.