Actualizado 21/07/2009 22:03

Nuevo gabinete presidente de Perú tendría corta vida

Por Patricia Vélez

LIMA (Reuters/EP) - El nuevo gabinete del presidente peruano Alan García tendría una corta vida y sería cambiado, más temprano que tarde, por uno que sirva de "parachoques" frente a las turbulencias que afronte el Gobierno en sus últimos dos años y a la venidera campaña electoral.

Tras las protestas que dejaron 34 policías y nativos muertos y en medio de una crisis financiera global que ya golpea a la economía local, García buscó aire en un gabinete comandado por el oficialista Javier Velásquez, quien viene de presidir el Congreso y cuenta apenas con un 20 por ciento de aprobación, según un reciente sondeo.

"Creo que es un gabinete que no va a durar mucho, incluso si es que Velásquez Quesquén sigue como primer ministro es muy probable que tenga varios cambios en el camino", dijo el analista político Augusto Alvarez-Rodrich.

"Es un gabinete un poco débil, que lo que más le falta es personalidad propia para cumplir un papel de parachoques de la Presidencia de la República", agregó.

Velásquez, cuyo nombramiento decepcionó a opositores que creen que carece de autonomía política y que su único mérito es ser leal a García, relevó al independiente Yehude Simon, quien renunció tras las cruentas protestas de junio de nativos en contra de la explotación de recursos naturales en la Amazonía.

Con un escaso nivel de respaldo, por debajo del 37 por ciento con el que se despidió su antecesor, Velásquez tendría que recurrir a su cintura política para, entre otras cosas, resistir a la presión por un cambio en la política económica pro mercado de García.

En eso confía el mandatario, quien tras juramentar al nuevo gabinete el pasado 11 de junio expresó: "Ahora el país espera orden e inclusión social y estoy convencido que el gabinete que en adelante presidirá Velásquez cumplirá esos objetivos, devolviendo al país confianza y optimismo".

Precisamente, la experiencia legislativa de Velásquez ayudaría a destrabar el aparato estatal y echar hacia adelante proyectos de inversión necesarios para generar empleo y reducir la pobreza, dijo Alfredo Torres, director de Ipsos Apoyo.

GARCIA AL VOLANTE

Sin embargo, para Santiago Pedraglio, analista político y profesor de la Universidad de Lima, "no es sólo un problema de los que están en el gabinete, sino de la voluntad política y de la forma cómo el Gobierno encare el asunto (...) comenzando con el propio presidente".

García, cuya popularidad repuntó tras la reestructuración de gabinete para ubicarse en junio en un 27 por ciento desde un 21 por ciento, también removió a los otros cinco ministros involucrados en las protestas. Aunque, ratificó en sus cargos a otros clave como el jefe de la cartera de Economía, Luis Carranza, y al canciller, José Antonio García Belaunde.

El norte de Perú, donde está la Amazonía que protegen los nativos, es rico en recursos energéticos y mineros, sectores vitales en uno de los países que más creció -un 9,8 por ciento- en el 2008 y el único de Latinoamérica que según analistas escaparía de la recesión este año.

Aún con un renovado gabinete, García actuaría "muy en primera fila (...) exponiéndose políticamente más ante turbulencias como alguna huelga larga o alguna crisis como la de Bagua", el epicentro de las protestas de junio, consideró Alvarez-Rodrich.

Además, restando apenas dos años de Gobierno, "ya no hay mucho tiempo para iniciar reformas nuevas, nuevas acciones, me parece que es subirse a una balsa y llegar al año 2011 y entregar el poder", agregó.

En la carrera hacia los comicios del 2011, Keiko Fujimori, hija del ex mandatario Alberto Fujimori, condenado a 25 años de prisión por abusos a los derechos humanos, sigue como líder en las intenciones de voto con un 20 por ciento, según la encuesta de Ipsos Apoyo.

En lo que resta de su período, García -quien ya había gobernado a Perú entre 1985 y 1990- y su Gabinete deberían centrarse en "estar alerta a los pedidos. ¿Cuántos de los pedidos que se han prometido en la mesa de diálogo se cumplen?", se preguntó Pedraglio.

Algunos de éstos aún son factibles, consideró.

(Por Patricia Vélez. Editado por Silene Ramírez)