Actualizado 12/08/2009 03:04

Obama critica a compañías de seguros EEUU en medio de protestas

Por Matt Spetalnick y Matthew Bigg

PORTSMOUTH, EEUU (Reuters/EP) - El presidente Barack Obama criticó a las compañías de seguros de salud estadounidenses el martes, en un intento de contrarrestar la fuerte oposición conservadora a la reforma del sistema de salud, durante un evento que provocó protestas.

Obama abrió su discurso diciendo que los estadounidenses frecuentemente "quedan rehenes" de las compañías de seguros de salud que les niegan cobertura o les cobran tarifas que no pueden pagar.

"Creo que está mal; está llevando a la bancarrota a las familias y las empresas y por eso es que vamos a aprobar la reforma del sistema de salud en el 2009", dijo el mandatario.

Fuera del evento en un colegio secundario de New Hampshire, unas 1.000 personas se congregaron en la calle para protestar.

De un lado de la calle, defensores de la reforma gritaban "Sí podemos" y sostenían carteles que decían "las compañías de seguros son enemigos del cambio" y "todos los estadounidenses merecen un sistema de salud accesible".

Del otro lado, opositores mostraban carteles que decían "Saquen las manos de mi sistema de salud" y otros lemas en contra del proyecto de reforma.

El presidente Obama está intentando recobrar la iniciativa de su plan de 1.000 billones de dólares después de que sus críticos ayudaron a fomentar el malestar público contra la principal prioridad doméstica del Gobierno.

"Ustedes deberían poder contar con su seguro de salud, no sólo cuando están pagando primas sino también cuando se enferman, y eso ocurrirá cuando aprobemos este plan", dijo Obama y se ganó el aplauso de las 2.000 personas presentes en el evento.

El encendido debate ha hecho caer los índices de aprobación de Obama.

La Casa Blanca esperaba que la actitud en la reunión de Obama fuera menos estridente y más civilizada que la observada en foros públicos realizados por miembros demócratas del Congreso, donde algunos de los presentes gritaron para callar a los oradores.

Obama pidió a la multitud que dé lugar a un vigoroso debate, pero aclaró: "Espero que hablemos unos con otros y no unos sobre otros".

El proyecto de Obama para reformar el sistema de salud, que busca brindar cobertura a casi 46 millones de estadounidenses que no tienen seguro, controlar los costos médicos y regular a las aseguradoras, fue criticado por los republicanos por su costo y su amplitud.

Republicanos dicen que, mediante la reforma, el Gobierno asumirá el control del sistema de salud de 2.500 billones de dólares, agrandando el déficit y dañando una economía que sigue sumida en su mayor recesión desde la Gran Depresión de la década del '30.