Actualizado 10/07/2009 10:00

Obama ve avances en acuerdo clima, ONU pide más al G-8

Por Jeff Mason y Phil Stewart

L'AQUILA, Italia (Reuters/EP) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo el jueves que el mundo hizo "avances importantes" para combatir el cambio climático al acordar limitar el calentamiento, aunque el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, afirmó que las medidas no eran suficientes.

"Es política y moralmente imperativo y una responsabilidad histórica para el futuro de la humanidad, incluso para el futuro del planeta Tierra", señaló Ban.

Las principales economías del mundo se reunieron en Italia y acordaron restringir a 2 grados centígrados el alza de las temperaturas, un avance impensable hace 12 meses, antes de que Obama fuera elegido presidente del segundo mayor emisor de gases de efecto invernadero a nivel global.

Pero el Grupo de los Ocho no consiguió persuadir al principal emisor, China, ni a India para que se unieran en la iniciativa de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial en un 50 por ciento para el 2050, un revés a los esfuerzos por asegurar un nuevo pacto de la ONU a fines de año.

Además, Canadá y Rusia parecieron dar la espalda al objetivo del G-8 de recortar las emisiones en un 80 por ciento para el 2050, un día después de ser anunciado.

En Washington, un proyecto de ley sobre calentamiento global de Obama sufrió un revés cuando el comité que trabaja en él suspendió sus actividades hasta que finalice el receso del Congreso en septiembre, lo que planteó dudas sobre si podrá entregarse a tiempo para que el mandatario lo presente a la ONU durante una cumbre en diciembre en Copenhague.

RETICENCIA DE CHINA E INDIA

Obama, en su primera reunión del G-8, indicó que se han terminado los días en los que su país no cumplía con sus responsabilidades sobre emisiones de CO2.

"Las sábanas de hielo se están derritiendo, los niveles del mar están creciendo, nuestros océanos se vuelven más ácidos y ya hemos visto los efectos de los patrones del clima sobre los recursos alimentarios y de agua y en nuestros hábitats", dijo

"Cada nación de este planeta está en riesgo y como ningún país por sí solo es responsable del cambio climático, ningún país puede enfrentarlo solo", aseveró.

Obama comentó que entendía las dudas de China e India sobre la reducción del consumo de energía cuando las potencias industriales ricas tenían "una cantidad mucho mayor de dióxido de carbono per cápita".

"Quieren asegurarse de que no tienen que sacrificar sus aspiraciones para el desarrollo y un mayor nivel de vida", dijo Obama a los periodistas en la cumbre del G-8 en L'Aquila, Italia.

Sin embargo, aunque Obama sostuvo que la cumbre italiana suponía un progreso hacia un nuevo tratado sobre cambio climático de la ONU, el jefe del organismo declaró de manera enérgica que la medida "no era suficiente".

El G-8 - Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia, Canadá y Rusia - estableció lo que Canadá definió como un "objetivo deseable" de recortar las emisiones de las raciones ricas en un 80 por ciento para el 2050 y reducir en un 50 por ciento las emisiones globales.

Lograron que los países emergentes como China, India y Brasil intentaran limitar a 2 grados el calentamiento global respecto a los niveles previos a la Revolución Industrial, cuando comenzó a extenderse el uso de combustibles fósiles.

India sostuvo que las naciones en desarrollo querían que el G-8 ofreciera financiación para ayudarles a enfrentar más inundaciones, olas de calor, tormentas y aumento de los niveles del mar producidos por el calentamiento global.

Además desean que los países ricos hagan recortes más severos a sus propias emisiones para el 2020.

ECONOMIA, MONEDA, COMERCIO

En el primer día de reuniones, el G-8 reconoció que todavía existen riesgos para la estabilidad financiera por la crisis económica, pero que las normas más estrictas para el comercio mundial y las finanzas se dejarán para la reunión del G-20, prevista para septiembre en Pittsburgh.

Antes de la reunión del viernes en la que estarán los líderes de nueve naciones africanas, incluido el libio Muammar Gaddafi, agencias de alimentos y de ayuda a la agricultura, el G-8 posiblemente prometerá 15.000 millones de dólares al plan liderado por Estados Unidos sobre seguridad alimentaria.

Los países ricos y en desarrollo también acordaron impulsar la paralizada ronda de Doha sobre comercio mundial y concluirlas en el 2010. Lanzadas en el 2001 para ayudar a los países pobres a prosperar, la ronda de Doha ha tropezado al proponer recortes de tarifas arancelarias y subsidios.

Hubo alguna tensión entre el G-8 y los países en desarrollo sobre la decisión de China de presentar una argumentación - apoyada por Rusia, India y Brasil - a favor de la diversificación a largo plazo del sistema monetario de reservas globales, frente al predominio del dólar.

Se trata de un asunto sensible para los mercados monetarios, y también para Pekín, que tiene una cifra estimada del 70 por ciento de sus 1,95 billones de dólares de reservas oficiales cambiarias extranjeras en dólares.

Pero aunque el canciller de Estado chino, Dai Bingguo, no nombró el dólar y Pekín ha tenido cuidado de no decir nada que debilite a la moneda estadounidense, China pidió un sistema más diverso para ayudar a la estabilidad de las reservas de divisas.

El primer ministro británico, Gordon Brown, dijo que cualquier debate sobre monedas alternativas sería a largo plazo, para no desestabilizar a los mercados mientras los líderes mundiales se centran en sacar a la economía de la recesión.