Por Joe Brock y Alex Lawler
LONDRES (Reuters/EP) - El petróleo caía el miércoles por debajo de los 70 dólares el barril, luego de que un informe del Gobierno de Estados Unidos mostró un incremento sorpresivo en los suministros de gasolina del mayor consumidor mundial, pero un descenso en los inventarios de crudo limitaba las pérdidas.
Las existencias de gasolina aumentaron en 3,4 millones de barriles, precisó la Administración de Información de Energía (EIA por sus siglas en inglés). Los analistas esperaban que los suministros cayeran. Ello fue contrarrestado por un gran descenso, de 3,9 millones de barriles, en los inventarios de crudo.
"Hubo una caída mayor a la esperada en los inventarios de crudo, pero el mercado está bajando y creo que es como resultado de los incrementos en las existencias de los productos, especialmente el de la gasolina", dijo Amanda Kurzendoerfer, analista de materias primas de Summit Energy.
A las 1556 GMT, el crudo estadounidense para entrega en julio operaba con una baja de 81 centavos de dólar, a 69,66 dólares el barril, tras haber caído más temprano hasta los 69 dólares. El crudo Brent para entrega en agosto cotizaba con un retroceso de 60 centavos de dólar, a 69,64 dólares.
Las existencias de combustibles destilados también treparon, de acuerdo al informe de la EIA, al crecer en 300.000 barriles. Los analistas habían proyectado un incremento de 800.000 barriles.
El crudo retrocedió más temprano porque las acciones europeas bajaban por cuarta jornada consecutiva debido a que algunos inversores liquidaron posiciones con las que habían apostado a una rápida recuperación económica.
Los datos de inventarios del Instituto Americano del Petróleo (API por sus siglas en inglés) el martes también habían presionado a los precios.
Los datos del API mostraron que las existencias de crudo cayeron en 1,3 millones de barriles y que las de gasolina aumentaron en 2,1 millones de barriles.
Los operadores de petróleo consideran que el informe de la EIA muestra un panorama más completo de los suministros porque las compañías deben responder a su relevamiento semanal.
El dólar operaba con una leve baja frente a una cesta de otras divisas, lo que le sumaba cierto apoyo al petróleo. Un dólar más débil puede incrementar la demanda de crudo y otras materias primas de los inversores.
La semana pasada, el petróleo tocó su máximo nivel del 2009 de más de 73 dólares, impulsado por las expectativas de una recuperación económica que aumentaría la demanda de combustible. Los precios aún operan muy por debajo del récord superior a los 147 dólares alcanzado el año pasado.
El miércoles, el presidente Barack Obama revelará sus planes para una reforma radical del sistema regulatorio para el sector financiero de Estados Unidos, que está destinada a prevenir crisis futuras como el colapso bancario que ha golpeado a la economía mundial.