Actualizado 17/08/2009 20:04

PREVIA-Inflación británica habría tocado mínimo 5 años en julio

Por Christina Fincher

LONDRES (Reuters/EP) - La inflación en Gran Bretaña habría alcanzado su menor nivel en cinco años en julio, alejándose aún más de la meta oficial, en medio de menores alzas en los precios de los alimentos y agresivos descuentos durante el verano boreal.

La inflación anual en los precios al consumidor cayó por debajo del objetivo del banco central de 2 por ciento en junio por primera vez en casi dos años, mientras que las proyecciones publicadas por el Banco de Inglaterra la semana pasada sugieren que las alzas de precios se ubicarán por debajo del 1,0 por ciento más adelante en el año.

La mediana de las proyecciones de los economistas consultados por Reuters apunta a que la inflación habría sido de 1,5 por ciento en julio, por debajo del 1,8 por ciento del mes anterior.

La inflación en los precios anuales minoristas, una medición amplia que incluye los costos de las hipotecas, caería a -1,7 por ciento desde -1,6 por ciento.

"Los alimentos podrían ser el principal contribuyente a la desinflación este mes luego que vieramos una ligera alza en los precios de los alimentos no estacionales, frente a una fuerte subida de 1,5 por ciento en el mes pasado", dijo Philip Shaw, economista jefe de Investec.

"También esperamos que los precios de los combustibles caigan en el mes, en contraste con un año atrás", agregó.

A pesar de la más severa contracción de los últimos 50 años, las presiones sobre los precios en Gran Bretaña han disminuido de manera más lenta que en muchos de sus socios comerciales.

La inflación en los precios al consumidor ya ha entrado en territorio negativo en Estados Unidos y en muchos países de la zona euro, mientras que en Gran Bretaña ha caído lentamente desde una lectura máxima de 5,2 por ciento en septiembre del año pasado.

El BoE (siglas en inglés para el Banco de Inglaterra) ha atribuido este fenómeno al alza en los precios de las importaciones debido a la caída de la libra en los mercados cambiarios durante los dos últimos años.

Sin embargo, la entidad reconoce que la recesión ha dejado holgura suficiente en la economía para hacer bajar los precios por algún tiempo más.

Los temores respecto a que la inflación se mantendría por debajo de la meta han llevado al BoE a expandir su programa de flexibilización cuantitativa en 50.000 millones de libras a 175.000 millones.

Alan Clarke, economista de BNP Paribas, dijo que los precios de los alimentos tendrían un fuerte impacto a la baja en la inflación en julio, mientras que las ofertas de verano también podrían ser un factor influyente.