Por Tetsushi Kajimoto
TOKIO (Reuters/EP) - La producción industrial japonesa creció el 5,9 por ciento en mayo luego de que la fabricación de automóviles y artículos electrónicos saliera de una profunda caída, aunque el aumento en los inventarios de algunos sectores sugirió que el repunte pronto perderá impulso.
Los manufactureros proyectan que el crecimiento de la producción se desacelerará al 3,1 por ciento en junio y a tan sólo un 0,9 por ciento en julio, en medio de la ausencia de una recuperación global convincente.
"La producción ha estado logrando grandes ganancias desde febrero, ya que los fabricantes tratan de reponer los recortes en los inventarios del año pasado, pero la demanda final sigue siendo débil y esperamos que la producción caiga nuevamente una vez los inventarios sean repuestos", dijo Junko Nishioka, economista jefe para Japón de RBS Securities.
"La economía de Japón no repuntará en el verdadero sentido hasta que la economía global, y especialmente la economía estadounidense, se recuperen. Y eso no será hasta la segunda mitad de este año o a comienzos del próximo", agregó.
Los fabricantes japoneses no pueden esperar mayor ayuda interna, ya que el aumento del desempleo y las débiles ventas minoristas señalan un frágil gasto interno.
Los inventarios han caído por cinco meses consecutivos luego de que el colapso del banco estadounidense Lehman Brothers en septiembre pasado provocó un desplome en las exportaciones clave del país, ocasionando fuertes recortes en la producción.
Sin embargo, los estímulos gubernamentales alrededor del mundo para la compra de automóviles han tenido una repercusión directa en Japón. La producción de autos tuvo un salto de 24,8 por ciento en mayo y los inventarios aumentaron por primera vez en cuatro meses, mientras que la producción de partes electrónicas subió el 10,5 por ciento.
El alza del 5,9 por ciento en la producción industrial general igualó el alza vista en abril, que fue la mayor desde 1953, pero estuvo por debajo de la proyección de un alza de 7,0 por ciento.
Los envíos totales aumentaron en un 4,5 por ciento en mayo, su alza mensual más fuerte desde 1992, mientras que los inventarios cayeron a su nivel más bajo desde el 2004.
El declive en los envíos de bienes capitales y maquinaria en general sugirió que las compañías aún no están dispuestas a invertir en sus fábricas o en maquinarias, explicó Takeshi Minami, de Norinchukin Research Institute.
"Ya que las compañías están saturadas con más fábricas y maquinarias de las que necesitan, el nivel de la producción industrial está lejos de ser satisfactorio, incluso a pesar de que la producción se esté recuperando", señaló.
Los economistas esperan un alza en la producción por algunos meses más, a medida que los fabricantes japoneses reconstruyen sus inventarios de manera más agresiva que sus competidores en el extranjero.
Esto debería ayudar a levantar la economía japonesa de su más profunda recesión en los tiempos modernos, con un crecimiento de un 0,4 por ciento en el período de abril y junio, después de una contracción durante cuatro trimestres consecutivos.
Como ejemplo del ligero consumo, los ventas minoristas se mantuvieron sin cambios en mayo en una base ajustada estacionalmente, registrando una caída de 2,8 por ciento en comparación con el mismo mes del año anterior.