Publicado 21/03/2015 22:46

RESUMEN 1-Irán rechaza "bullying" mientras Occidente remarca unidad en conversaciones nucleares

* Líder iraní desconfía de Estados Unidos

* Potencias occidentales ven avances, pero algunos temas no resueltos

* Instan a Irán a tomar "decisiones difíciles"

Por Lesley Wroughton

LONDRES, 21 mar, 21 Mar. (Reuters/EP) -

- El líder supremo de Irán manifestó el sábado su desconfianza hacia los esfuerzos de Estados Unidos por alcanzar un acuerdo sobre su programa nuclear, pese a que Washington y sus aliados hablaron de avances reales e instaron a Teherán a tomar "decisiones difíciles".

Cuando sólo faltan 10 días para un plazo final de fines de marzo, el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, denunció el "bullying" de Estados Unidos en las negociaciones y reiteró que Teherán no persigue desarrollar armamento nuclear.

Tras conversaciones de una semana con Irán en Lausana, Suiza, el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, voló a Londres para conversar con sus contrapartes de Gran Bretaña, Francia y Alemania sobre posibilidades para resolver la disputa, que se arrastra desde hace más de una década y que por momentos ha amenazado con empujar a Oriente Medio al borde de la guerra.

En una declaración conjunta, los ministros de Relaciones Exteriores dijeron que concuerdan en que se han logrado "avances sustanciales" con Irán en áreas clave, pero que aún están pendientes temas importantes.

"Ahora es el momento de que Irán, en particular, tome decisiones difíciles", dijeron.

El secretario británico de Asuntos Exteriores, Philip Hammond, dijo a los periodistas que los ministros occidentales concuerdan en que "no haremos un mal acuerdo que no cumpla con nuestras líneas rojas".

Junto a China y Rusia, esos cuatro países están tratando de llegar a un acuerdo con Irán que limitaría los aspectos más delicados del programa atómico de Teherán a cambio de un alivio de sanciones internacionales.

Israel, un aliado de Estados Unidos, considera a las actividades nucleares de Irán como una amenaza existencial, pese a las reiteradas negativas de Teherán de que esté buscando adquirir la capacidad para fabricar armamento nuclear.

SOLUCIÓN DURADERA

Tras conversar durante dos horas y media en Londres, los ministros occidentales dijeron en un comunicado conjunto que "cualquier solución debe ser abarcadora, duradera y verificable. Ninguno de nuestros países puede suscribir un acuerdo que no cumpla con todos estos términos".

El énfasis en su postura común parecía diseñada para contrarrestar la impresión de que habría una división entre Washington y París.

Funcionarios estadounidenses han manifestado en privado su pesar por las críticas abiertas de Francia respecto a las negociaciones y sus exigencias de restricciones más enérgicas a los iraníes. Funcionarios han expresado preocupaciones de que París pueda bloquear un acuerdo en Naciones Unidas.

El plazo para un acuerdo completo es el 30 de junio.

Las seis potencias reanudarán las negociaciones con Irán en Lausana la próxima semana.

Occidente sospecha que Irán persigue la capacidad de generar armamento nuclear y Naciones Unidas ha impuesto severas sanciones económicas sobre Teherán.

Irán afirma que su programa nuclear sólo apunta a propósitos pacíficos, como el desarrollo de tecnología médica y energía nuclear y quiere que se levanten las sanciones.

En Irán, Khamenei reiteró que Teherán no iba a ser obligado a ceder a las demandas de Occidente.

Como líder supremo de Irán, el ayatolá tiene la última palabra en todos los temas de Estado.

"Lo que el pueblo iraní no quiere es la imposición y el bullying de Estados Unidos", dijo Khamenei, repitiendo en un momento la frase "Muerte a Estados Unidos" después de que fue gritada por la multitud.

El líder acusó a Washington de buscar fomentar la inestabilidad en Oriente Medio.

"Plantean el tema de una bomba atómica. (Pero) incluso ellos saben que no estamos persiguiendo (el desarrollo de) armamento nuclear. Pero sólo lo usan como excusa para presionar al pueblo iraní", acusó.

El ayatolá criticó también a los "arrogantes" países de Occidente por lo que dijo que había sido su papel en el desplome de los precios mundiales del crudo , lo que ha dañado a la economía de Irán.

Más temprano, el presidente iraní, Hassan Rouhani, había mostrado una actitud más optimista, diciendo que "no hay nada que no pueda ser resuelto" entre las partes.