Actualizado 14/10/2010 10:33

El Senado argentino aprueba el aumento de las pensiones


BUENOS AIRES, 14 Oct. (Reuters/EP) -

El Senado de Argentina ha aprobado, tras un prolongado debate, un proyecto de ley presentado por la oposición que establece un aumento de las pensiones para los jubilados. No obstante, la iniciativa aún podría ser vetada por el Gobierno, que dice que su aplicación podría causar la bancarrota de las arcas públicas.

Tras un empate en la votación, con 35 votos a favor y 35 en contra, la decisión quedó en manos del vicepresidente de la nación y presidente del Senado, Julio Cobos (abierto crítico del Gobierno de la presidenta Cristina Fernández), quien finalmente desequilibró la balanza en favor del proyecto legislativo.

La Cámara de Diputados argentina ya había dado su aprobación en agosto a la iniciativa presentada por la oposición, que aumenta la pensión mínima por jubilación, actualmente en los 1.046,5 pesos (188 euros), a un 82 por ciento del salario mínimo.

Se calcula que más de 5 millones de jubilados se beneficiarán del aumento, que elevará las pensiones hasta los 1.426,8 pesos (256 euros).

El instrumento podría ser vetado por la presidenta Fernández, lo que sería una medida incómoda para el Gobierno de cara a las elecciones presidenciales que Argentina celebrará dentro de un año.

El Gobierno ha reiterado que el aumento de la pensión a los jubilados dispararía la inflación y provocaría un caos en las cuentas públicas. "Estamos frente a un proyecto de fuerte contenido electoral", dijo en su discurso Miguel Angel Picheto, jefe del bloque oficialista en el Senado, poco antes de la votación.

El ministro de Economía argentino, Amado Boudou, dijo el miércoles a una emisora de radio que de convertirse en ley, el ente estatal que administra las jubilaciones y pensiones, Anses, tendrá un gasto adicional de 40.088 millones de pesos en 2011.

Dos años después de iniciar mandato el actual Gobierno, el vicepresidente Cobos devino en opositor después de rechazar una propuesta del Gobierno para aumentar los impuestos a las exportaciones agrícolas, una iniciativa que había desatado una fuerte revuelta en el sector.