Por Susan Cornwell
WASHINGTON (Reuters/EP) - Mientras el líder libio Muammar Gaddafi hablaba ante Naciones Unidas en Nueva York el miércoles, su Gobierno era reprendido en una sesión del Senado estadounidense, en Washington.
El Senado aprobó una resolución condenando la "fastuosa" ceremonia de bienvenida que Libia dio el mes pasado al sentenciado por el ataque explosivo de Lockerbie, el agente libio Abdel Basset al-Megrahi, y exigió que Libia se disculpe por la celebración.
Sin embargo Gaddafi, en la Asamblea General de la ONU, continuó su discurso contra el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y pidió que los antiguos colonizadores de Africa compensen a ese continente con 7,77 billones de dólares.
Gaddafi estaba dando su discurso cuando el senador Charles Schumer pidió un par de minutos en el Senado para presentar la resolución, y seguía dirigiéndose al panel de naciones cuando Schumer terminó y el Senado aprobó la resolución en una votación en voz alta.
La resolución también condenó la liberación de Megrahi desde una prisión escocesa, decisión que enfureció a Washington.
El agente libio, en una etapa terminal del cáncer, estuvo preso en relación con el atentado explosivo de 1988 de un vuelo de Pan Am sobre la localidad escocesa de Lockerbie, donde murieron 270 personas, incluyendo a 189 estadounidenses.
Schumer señaló que la liberación de Megrahi golpeó a muchas personas en ambos lados del Atlántico. Y agregó que es incluso peor que el hombre que estuvo preso por el "cruel" atentado de Lockerbie llegara a su natal Libia y fuera recibido por cientos de personas con lienzos y arrojando pétalos de flores.