Actualizado 16/07/2009 00:03

Sube optimismo Europa y EEUU, Asia temerosa por estímulo

Por Matthew Robinson y Hideyuki Sano

NUEVA YORK/TOKIO (Reuters/EP) - Cifras en Estados Unidos y Europa dadas a conocer el miércoles ofrecieron nuevas esperanzas de una moderación de la recesión global, mientras que los dos principales bancos centrales de Asia indicaron la necesidad de frenar los estímulos de emergencia.

La producción industrial de Estados Unidos cayó a un paso más lento en junio y el sondeo fabril del estado de Nueva York registró su lectura más fuerte desde abril del 2008, señales positivas para mercados arrastrados por información mixta desde ambos lados del Atlántico esta semana.

Las ventas de autos europeos mostraron el primer incremento mensual en más de un año, gracias a los incentivos para deshacerse de autos viejos en algunas grandes economías, aunque los analistas advirtieron que la mejora se debía además a las desastrosas cifras de un año atrás.

Una abrupta caída en los costos de los combustibles bajó los precios del consumidor en la zona euro por primera vez interanualmente en junio, lo que debería permitir que las tasas de interés permanezcan bajas y que los consumidores tengan algo más de poder de compra.

Las acciones en Estados Unidos subieron, impulsadas por fuertes resultados trimestrales de Intel Corp y Goldman Sachs el martes, lo que impulsó el optimismo de un repunte en las ganancias corporativas.

Las acciones globales, representadas por el índice mundial MSCI, subieron un 2,5 por ciento.

"El mercado está preparado para sacudirse las débiles cifras económicas, eligiendo concentrarse en resultados que rompan los consensos y panoramas optimistas de parte de las corporaciones", dijo Henk Potts, estratega de acciones de Barclays Stockbrokers.

Los gigantes de las tarjetas de crédito Capital One Financial Corp y Discover Financial Services reportaron menores moratorias e incumplimientos durante junio, señalando potencialmente que las posiciones de los créditos de los consumidores estadounidenses no se están deteriorando tan rápidamente como se temía.

Los precios de los bonos del Gobierno estadounidense caían y sus rendimientos subían después de que el índice de condiciones empresariales Empire State de la Reserva Federal de Nueva York subió a -0,55 en junio, lo que los inversores tomaron como una señal de que la caída en el sector fabril del estado estaba disminuyendo.

"Todavía es una señal tentativa, pero consistente con otros reportes que muestran que la recesión puede estar cerca de un fin", dijo Gary Thayer, economista jefe de Wells Fargo Advisors.

El dólar caía a mínimos de un mes contra el euro mientras los inversores se acercaban a monedas y activos de rendimientos más altos.

A pesar de las buenas señales en el exterior, la información mostró que el desempleo en Gran Bretaña tocó su punto más alto desde enero de 1997 en los tres meses a mayo.

ASIA NERVIOSA ACERCA DE SOBRECALENTAMIENTO

En medio de señales tentativas de recuperación en Occidente, las principales naciones de Asia sentían temor a que sus economías se sobrecalentasen con los paquetes de estímulo gubernamentales.

El Banco de Japón extendió apoyo en financiamiento de crisis por otros tres meses, menos de lo esperado.

El banco central chino señaló además preocupación acerca de la cantidad de dinero atravesando su economía, tomando el más reciente en una serie de pequeños pasos para endurecer su política al decirle a los bancos que tendrían que comprar notas especiales en septiembre.

"Las condiciones financieras están mejorando como una tendencia. Pero en el presente, decidimos que era apropiado mantener las medidas", dijo el gobernador del Banco de Japón, Masaaki Shirakawa, en una conferencia de prensa.

"Si las condiciones mejoran más, sería apropiado terminar o revisar las variadas medidas al cierre del año", agregó.

Muchas esperanzas de un reavivamiento global se han centrado en China, donde el pródigo gasto de estímulo del Gobierno parece estar teniendo el efecto deseado en una economía apaleada por una turbulencia en el comercio a medida que el mundo desarrollado caía en recesión el año pasado.

Un sondeo de Reuters sugirió que la tercera economía mundial estaba en camino a alcanzar su meta de crecer un 8 por ciento para este año.