Actualizado 19/08/2009 07:16

Trabajadores Doe Run acuerdan paro 31 agosto en Perú

Por Terry Wade

LA OROYA, Perú (Reuters/EP) - Trabajadores de Doe Run Perú acordaron el martes realizar un paro por tiempo indefinido en la región andina de Junín el 31 de agosto para pedir al Gobierno que dé una extensión de un plan ambiental a la firma, que enfrenta una crisis financiera, dijo un líder sindical.

Doe Run Perú, del estadounidense Grupo Renco y que opera la mayor fundición y refinería de metales del país, paralizó su producción en junio, luego de que bancos le cortaron un crédito vital para sus operaciones, en momentos en que la crisis financiera mundial hundió los precios de los metales.

La empresa -que se declaró en reestructuración y solicitó la protección ante acreedores para evitar embargos o retenciones de cuentas- tiene inversiones pendientes con el Estado por 150 millones de dólares para un plan ambiental (PAMA) en La Oroya, donde está el complejo, el cual vence en octubre.

"Queremos la extensión del PAMA porque es clave para la reactivación de los puestos de trabajo. Los bancos no van a prestar el dinero sin la extensión del PAMA", dijo a Reuters el líder sindical, Royberto Guzmán.

Los 3.500 trabajadores de Doe Run Perú acordaron en una asamblea realizar protestas y hasta bloqueos de una importante carretera que une Lima con el centro del país, donde se ubican varios yacimientos mineros.

Perú es uno de los mayores productores de metales del mundo y la minería es uno de los pilares de su economía.

"Los trabajadores han votado por un paro regional para el 31 de agosto", precisó Guzmán, quien dijo que los trabajadores tendrán el apoyo de otros sindicatos de la región de Junín.

Doe Run, que debe además 110 millones de dólares a proveedores mineros, ha pedido al Gobierno una extensión de 30 meses del plazo del PAMA y ha presentado un plan de salvataje que han sido calificados por el Gobierno como "poco serio".

El Gobierno ha afirmado que podría darle una razonable extensión del PAMA, si la empresa inyecta por lo menos 100 millones de dólares de capital fresco, entrega el 100 por ciento de sus acciones al Estado como garantía y llega a un acuerdo con los acreedores.

(Por Terry Wade, escrito por Teresa Céspedes, Editado por Juana Casas)