CARACAS, 12 Ene. (Reuters/EP) -
La fuerte devaluación del bolívar fuerte que golpeará los bolsillos de los venezolanos podría aumentar las posibilidades de que la oposición recupere el espacio perdido hace cuatro años, opinó el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, uno de los principales adversarios del Gobierno de Hugo Chávez.
Según Ledezma, incluso los 'chavistas' podrían buscar un viraje político tras 11 años de "revolución socialista" y cuatro de una Asamblea Nacional que respalda todas las propuestas de Chávez por estar controlada por legisladores oficialistas.
Las elecciones legislativas están previstas para el 26 de septiembre y, aunque Chávez confía en la victoria, en el seno de su Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) dudan de que puedan quedarse con dos tercios de los escaños necesarios para aprobar automáticamente cualquier proyecto del Ejecutivo.
"Hay gente que pudiera tener simpatías por el presidente Chávez pero que no está de acuerdo con la manera como se ha manejado el Parlamento, que se ha convertido en un 'ghetto' de sectores radicales", advirtió en declaraciones a Reuters. "Se quiere un Parlamento que se ocupe de controlar al Poder Ejecutivo", añadió.
La oposición se retiró en bloque en los comicios legislativos de 2005 alegando que el oficialismo esta participando con ventaja, dejando en manos del 'chavismo' prácticamente todos los escaños del Parlamento venezolano. Pero esta vez, según Ledezma, la contienda de septiembre podría dejar a Chávez en minoría.
Chávez decidió el pasado viernes devaluar la moneda y llevó el tipo de cambio de 2,15 bolívares fuertes por dólar a 2,6 bolívares fuertes por dólar para bienes prioritarios, como alimentos, y creó un "dólar petrolero" de 4,3 bolívares fuertes para otros rubros.
Los venezolanos se han resignado a que esta nueva medida impacte considerablemente en la inflación que este año llegó a 25,1 por ciento, una de las más altas del mundo. No obstante, este sentimiento no impidió que miles de personas abarrotaran este fin de semana las tiendas de electrodomésticos para comprar productos todavía a precio de "dólar viejo".
"La gente quiere invertir sus bolívares en una licuadora, una tostadora de pan, en una nevera, en una cocina, y muchas veces no es que tenga urgencia de contar con ese artefacto, simplemente siente que sus bolívares están bien protegidos en una licuadora, porque no tienen confianza", resaltó Ledezma.
¿BOMBA DE TIEMPO?
Mientras Chávez lleva una decena de victorias electorales, los 28 millones de habitantes de ese país han vivido azotados por la delincuencia y la inflación durante muchos años. Además, meses atrás se iniciaron frecuentes fallas eléctricas y del servicio de agua.
Pero el mandatario, un hábil militar retirado que habla coloquialmente en largos discursos, ha logrado mantener la simpatía de los electores. "Chávez es consecuencia de los errores cometidos (por la oposición) y por eso hay que hacer una ola de rectificaciones y de renovación del compromiso que tenemos con la colectividad", reconoció Ledezma, un político formado dentro de los llamados "partidos tradicionales" que gobernaron el país antes que Chávez.
Analistas afirman que actualmente la popularidad del mandatario ha caído unos diez puntos en los últimos meses, lo que plantea un reto para la llamada "Campaña Admirable" oficialista hacia las legislativas.
Hace un año, el mandatario venezolano triunfó en un referendo que le permite la postularse a la presidencia cuantas veces quiera, al convencer a los electores una propuesta que partió con un 8 por ciento de respaldo.
Una nueva ley electoral que permite al partido con más votos quedarse con un mayor porcentaje de curules que el de sufragios a su favor, pone en dificultades a decenas de partidos políticos y organizaciones civiles opositoras que deben presentar candidatos unitarios para lograr entrar en el Legislativo.
"Estamos hablando de presentar candidaturas unitarias pero que tengan una plataforma, un programa de lucha", dijo Ledezma pese a que asegura que el Gobierno utilizará los fondos provenientes de la devaluación para fortalecer sus finanzas y financiar la campaña electoral con miras a los comicios legislativos de septiembre.