Actualizado 01/10/2014 10:47

¿Hubo intento de golpe de Estado en Ecuador contra Correa el 30S?

El presidente Correa tras ser atacado por policias amotinados
Foto: REUTERS

MADRID, 30 Sep. (Notimérica/EP) -

   El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha recordado este 30 de septiembre a través de Twitter a los que fallecieron en 2010 durante lo que el Gobierno ecuatoriano califica como "intento de golpe de Estado del 30S" y ha llamado a la sociedad ecuatoriana a celebrar hoy "el triunfo de la democracia", pero hay diferentes versiones entre críticos, intelectuales y expertos sobre lo que ocurrió realmente aquel día.

   El 30S fue una jornada en la que reinó la violencia y el caos. Los policías se sublevaron, Correa fue retenido durante varias horas en un hospital y los militares acudieran a rescatarlo en medio de un intenso tiroteo. El resultado fueron diez fallecidos y cerca de 300 heridos que, a cuatro años de los hechos, todavía pesan sobre la memoria de los ecuatorianos.

   La mañana de la jornada fatídica Correa aparecía exaltado en una ventana hablándole a una muchedumbre que gritaba; una imagen que el mundo observó con asombro. "Señores, si quieren matar al presidente, aquí está. Mátenme si les da la gana, mátenme si tienen valor, en vez de estar en la muchedumbre, cobardemente escondidos", gritó.

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   Los policías se habían rebelado en rechazo a la aprobación de la Ley de Servicio Público y se oponían a la modificación de una serie de beneficios laborales que habían estado recibiendo. Correa se había acercado hasta el lugar donde se realizaban las protestas y en su discurso criticó que "nunca antes se había destinado tanto presupuesto para la Policía Nacional" como en su Gobierno y que los sueldos se habían duplicado.

   Después de pronunciar estas palabras, Correa abandonó el lugar entre la muchedumbre, escoltado y protegido por una máscara de gas, ya que habían sido lanzados gases lacrimógenos, y se lastimó la rodilla de la que había sido operado el día de antes.

   A esa hora, ya se habían producido varias manifestaciones en diversos puntos del país acabaron con quema de llantas y consignas contra el Gobierno. En Guayaquil, los saqueos, bloqueos y asaltos alteraron a la ciudad. Se suspendieron las clases en todo el país, según informó el diario ecuatoriano 'El Comercio'.

   La seguridad personal del presidente llevó al mandatario al Hospital de Policía Nacional para que le atendieran su rodilla. Allí permaneció retenido hasta por la noche, cuando efectivos de fuerzas especiales lo rescatarían tras un violento enfrentamiento con policías sublevados.

   Cerca de las 13.00 los partidarios de Correa, instados por el canal público comenzaron a protestar en favor del presidente. También a las afueras del Hospital de la Policía, acudieron miles de personas que protestaban por su retención y que fueron instados por el canciller, Ricardo Patiño, a enfrentarse a la Policía para "rescatar al presidente".

   Sobre esa hora, Correa firmó digitalmente el estado de excepción en todo el territorio nacional y se publicó a través de Twitter. Los medios se vieron obligados a suspender su transmisión para unirse a la señal estatal.

EL RESCATE DEL PRESIDENTE

   El operativo de rescate de las fuerzas especiales también es un tema muy discutido en Ecuador. En medio de su ejecución se realizaron varios disparos en un hospital en el que se encontraban unos 70 pacientes.

   Esa misma noche, Correa fue sacado del Hospital de la Policía en un vehículo no blindado y este recibió, según fuentes oficiales, cuatro impactos de fusil, tres en el capot y uno en el parabrisas, justo en el lado en el que iba el mandatario, en medio de un intenso tiroteo.

   En el momento en el que Correa intentaba alejarse en coche, el policía de fuerzas especiales Froilán Jiménez cayó muerto tras recibir un impacto de bala.

   Correa llegó al Palacio de Gobierno cerca de las 21.30 e inmediatamente se dirigió a una multitud que le esperaba en la Plaza de la Independencia, contigua a la Casa de Gobierno. El mandatario acusó a individuos vinculados al expresidente Lucio Gutiérrez de instigar a miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía a rebelarse desinformándolos respecto a un supuesto prejuicio en sus bonificaciones.

   La oposición achacó al presidente la culpa por su mal manejo de la crisis y opinaron que el enfrentamiento entre las fuerzas especiales y los policías se produjo porque los "rescatistas" del presidente acudieron fuertemente armados. De su parte, el Gobierno sostuvo que las protestas fueron una excusa y que algunos cargos en la Policía perseguían un golpe de Estado y para ello utilizaron al resto de funcionarios.

LAS REACCIONES INTERNACIONALES

   La comunidad internacional se hizo eco de la afirmación del presidente y calificó el hecho como un "intento de golpe de Estado", mientras que algunos medios de comunicación internacionales hablaban más bien de "levantamiento policial" y los medios ecuatorianos no se refirieron al hecho como un golpe de Estado, sino como un amotinamiento o "rebelión policial".

   Por su parte, algunos intelectuales como el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel no dudaron en calificar los hechos como "un intento de golpe de Estado".

   Pérez Esquivel afirmó que si las intenciones de tomar el poder fracasaron se debió a la "reacción social e internacional" y a que el entonces secretario general de la UNASUR, Néstor Kirchner, "actuó rápidamente convocando a los presidentes que integran el organismo regional en defensa de la democracia y del presidente Correa".

   "La política no es nueva, recordemos los intentos de golpe de Estado ocurridos en Venezuela y Bolivia. Ahora fue el turno de Ecuador y hay que estar atentos a la situación que vive el Paraguay", dijo el Premio Nobel.

LOS JUICIOS

   Más de 50 juicios por distintos tipos penales en relación a lo que ocurrió el 30 S. En estas causas se ha procesado a 310 personas, se han emitido 17 sentencias y se han condenado a 83 imputados.

   Durante la jornada, los policías Froilán Jiménez y Edwin Calderón, los militares Jacinto Cortez y Darwin Panchi y el estudiante Juan Pablo Bolaños murieron. A día de hoy, sólo en este último caso se ha logrado sentenciar al presunto responsable. Los otros procesos siguen en investigación.

   La indagación previa sobre el presunto delito de golpe de Estado, que es la tesis que se maneja desde el Gobierno, todavía continúa. También se investiga todavía el levantamiento de los militares en el sector de La Recoleta, contiguo al Ministerio de Defensa, en el centro histórico de Quito.

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