Actualizado 16/07/2014 04:50

Obama promete a Merkel más cooperación a nivel de Inteligencia

WASHINGTON, 16 Jul. (Reuters/EP) -

   El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha prometido este martes a la canciller alemana, Angela Merkel, una mayor cooperación a nivel de Inteligencia, tras el escándalo de espionaje que ha sacudido las relaciones entre ambos países.

   "El presidente (Obama) y la canciller (Merkel) han intercambiado sus puntos de vista sobre la cooperación bilateral a nivel de Inteligencia, y Obama ha dicho que permanecerá en comunicación para mejorar este aspecto", ha indicado la Casa Blanca a través de un comunicado.

   Este mismo martes, el diario alemán 'Bild' ha afirmado que el jefe de la oficina de la CIA en Berlín expulsado por Alemania después de las nuevas acusaciones de espionaje contra Estados Unidos abandonará el país antes de que concluya esta semana.

   El diario ha citado a las fuerzas de seguridad al explicar que ahora es sólo "cuestión de tiempo" y ha añadido que la presión sobre la Embajada estadounidense ha crecido significativamente en los últimos días con la intención de que fije una fecha de salida.

   El Ministerio de Exteriores alemán, por su parte, no ha hecho valoraciones y se ha ceñido a las últimas declaraciones en las que el Gobierno se refería a una salida "sin demora" del representante de Inteligencia.

   La decisión de expulsar al representante de la CIA ha llegado después de unos informes sobre el espionaje estadounidense en Alemania y de que un trabajador extranjero de la Inteligencia alemana fuera arrestado bajo sospecha de ser informador de la CIA. La semana pasada, Berlín también dijo que había descubierto a un supuesto espía estadounidense en el Ministerio de Defensa.

    Estos casos agravan un malestar que se hizo especialmente patente el año pasado, cuando trascendió el supuesto pinchazo del teléfono de la canciller alemana, Angela Merkel. Lo sucedido hasta ahora ha enfriado las relaciones entre Berlín y Washington hasta niveles cercanos a los alcanzados cuando el predecesor de Merkel se negó a la invasión de Iraq en 2003.

   Un portavoz de la Embajada de Estados Unidos ha declinado hacer comentarios más allá de esta declaración: "Estados Unidos comprenden la importancia de este problema y como una cuestión de rutina respetan los deseos del Gobierno alemán con relación a la presencia y acreditación de diplomáticos estadounidenses en Alemania".