WASHINGTON, 28 Abr. (Reuters/EP) -
Los gobiernos de Estados Unidos y Guatemala acordaron hoy analizar fórmulas para llegar a acuerdos de colaboración en la lucha contra el narcotráfico y en materia de inmigración ilegal.
Los presidentes de Estados Unidos, George W. Bush, y de Guatemala, Álvaro Colom, se reunieron hoy en la Casa Blanca donde conversaron sobre la posibilidad de llegar a algún acuerdo migratorio y aumentar la ayuda económica para impulsar el comercio bilateral, según comentaron después de la entrevista ambos mandatarios.
Bush señaló que se ha comprometido a analizar la posibilidad de una concesión de un estatus de protección temporal (TPS por sus siglas en inglés), a guatemaltecos que residen de forma ilegal en Estados Unidos.
"El presidente (de Guatemala) me pidió considerar el TPS, el TPS para los ciudadanos, y también una ley amplia de inmigración", informó Bush en rueda de prensa conjunta en la Casa Blanca.
"Yo le aseguré que consideraré su petición y le aseguré que creo que una reforma amplia de inmigración está en los mejores intereses de nuestro país", agregó.
El TPS históricamente se ha otorgado a países en situación de catástrofes naturales, como Honduras y Nicaragua, pero los analistas estiman que es difícil que pueda darse a otro país debido a la polémica que se vive en Estados Unidos por el tema migratorio.
Por su parte, las autoridades de Guatemala están preocupadas por el aumento en el número de deportaciones de guatemaltecos de Estados Unidos, que en 2007 llegaron a 23.000, según la Organización Internacional para las Migraciones.
Además, Bush reconoció la co-responsabilidad que tiene Estados Unidos con México y Centroamérica en la lucha contra el narcotráfico, ya que el país norteamericano es el principal consumidor de estupefacientes del continente. "Le dije al presidente (Colom) que estamos trabajando duro aquí para reducir la demanda de drogas en Estados Unidos", afirmó Bush.
Por su parte, Álvaro Colom reconoció el apoyo que ha tenido por parte de Estados Unidos sobre ese tema y le prometió mantener "la guerra" contra el narcotráfico aunque subrayó que ese es un "asunto regional".
Finalmente, Bush aseguró que seguirá involucrado en ayudar a su aliado en el combate a la pobreza porque Estados Unidos quiere un "vecindario pacífico y próspero" y avaló las leyes aprobadas recientemente en Guatemala que promueven los derechos de las mujeres.