TEGUCIGALPA, 27 Ago. (EP/AP) -
El Gobierno hondureño advirtió de la posibilidad de que las remesas de los más de 1,1 millones de hondureños que residen en Estados Unidos puedan disminuir este año debido a las deportaciones masivas que realiza ese país. En lo que llevamos de 2007, el Gobierno estadounidense ha deportado a más de 40.000 hondureños.
"De alguna manera, el flagelo de las deportaciones tiene una incidencia en el país", afirmó el viceministro de Asuntos Exteriores, Eduardo Enrique Reina, en una entrevista publicada el domingo por el diario local 'La Tribuna'. Reina añadió que "esa situación genera preocupación en el Gobierno" de Honduras, ya que "las remesas representan una cantidad importante de dinero" para el país, "aunque no vengan en un solo paquete, sino dispersas".
El Banco Central aseguró que Honduras recibió en 2006 2.400 millones de dólares en remesas y previó que en 2007 la suma supere los 3.000 millones. El año pasado, Estados Unidos expulsó de su territorio a 24.000 hondureños sin documentos, pero esa cifra casi se ha duplicado en los ocho primeros meses de 2007.
El Partido Nacional, el principal en la oposición, considera que la situación se debe a una represalia de Washington, porque el presidente, Manuel Zelaya, aparentemente intenta alejarse de Estados Unidos para acercarse a sus homólogos izquierdistas de Venezuela, Hugo Chávez, y de Nicaragua, Daniel Ortega.