WASHINGTON, 4 Ago. (Reuters/EP) -
El Servicio Secreto de Estados Unidos ha levantado la alerta de seguridad en la entrada de la Casa Blanca después de aislar la avenida Pensilvania frente a la residencia presidencial y cerrar uno de los ingresos al recinto durante más de una hora este lunes por la mañana.
Un perro detector de explosivos había alertado sobre un vehículo que estaba estacionado en un garaje cercano y las autoridades impedían el paso a los peatones por la zona. Horas después, un portavoz del Servicio Secreto ha indicado que no había peligro.
Al personal de la Casa Blanca y a los periodistas no se les permitía ingresar por la puerta noroeste, aunque algunos de los trabajadores pudieron hacerlo por el ala este. Más tarde, las autoridades dijeron que el cierre se había producido por la presencia de un paquete sospechoso.
La avenida Pensilvania está abierta sólo para el paso de peatones y vehículos oficiales en los alrededores de la Casa Blanca.