Actualizado 03/07/2014 22:18

Mayor actividad sísmica en Oklahoma estaría asociada a industria energética: estudio

Por Carey Gillam

3 jul, 3 Jul. (Reuters/EP) -

- Un salto en la cantidad de terremotos en Oklahoma a una tasa nunca vista antes por los científicos parece estar causado por un pequeño número de pozos en los que se inyectan las aguas residuales asociadas con la producción de petróleo y gas, según un estudio publicado el jueves.

Sólo unos pocos de los llamados pozos de eliminación, que operan a volúmenes muy altos, "crean un riesgo sísmico antropogénico sustancial", según los hallazgos de los investigadores de la universidad de Cornell publicados en la revista Science.

La actividad sísmica en Oklahoma se ha disparado en los últimos años. El Servicio Geológico de Estados Unidos advirtió recientemente que el estado enfrenta un riesgo creciente de esa clase de actividad potencialmente más dañina.

Hasta fin de junio, la cantidad de terremotos potencialmente dañinos -de magnitud 3,0 o más- creció más de un 120 por ciento en comparación al total del año pasado, según funcionarios del estado.

La situación es preocupante en un estado en donde la economía local está muy ligada a la industria del gas y del petróleo.

Y aunque la mayoría de los terremotos se produce naturalmente, algunos científicos temen que las inyecciones en pozos profundos de aguas residuales a alta presión derivadas de la producción de gas natural y de petróleo puedan provocar terremotos.

Oklahoma tiene 4.597 de esos pozos. La Asociación Independiente del Petróleo de Oklahoma (OIPA por sus iniciales en inglés) dijo que como la actividad del petróleo y del gas es tan importante en el estado, es probable que se produzca actividad sísmica cerca de las operaciones de esas industrias pero que eso no prueba que exista relación.

Otros estados que carecen de una actividad significativa de extracción de gas y petróleo también han sufrido un incremento en la actividad sísmica, dijo el presidente de la OIPA, Mike Terry.

"Apurarse a juzgar en base a los hallazgos de un investigador no brinda un entendimiento claro de las causas", señaló Terry.

Según la investigación, se podrían inducir terremotos a casi 30 kilómetros de un pozo de disposición de aguas residuales, más allá del rango actual de 5 kilómetros que se usa actualmente para diagnosticar los terremotos inducidos.

Además, cuatro de los pozos con mayor volumen en Oklahoma eran capaces de provocar un 20 por ciento de los terremotos recientes en la región, según los investigadores.

El estudio indica que, en general, los terremotos en áreas de deshechos de aguas residuales de la industria constituyeron casi la mitad de toda la actividad sísmica del centro y el este de Estados Unidos entre 2008 y 2013.