Actualizado 07/09/2014 18:25

Al Qaeda condena ejecución de periodistas: "Eran mensajeros de la verdad"

Imagen del periodista estadounidense Steven Sotloff
Foto: @KKNN_1435

LONDRES, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -

   El islamista radical Abú Qatada, considerado la mano derecha del líder de Al Qaeda, Usama bin Laden, en Europa, ha condenado la reciente decapitación de los periodistas estadounidenses James Foley y Steven Sotloff a manos de milicianos del Estado Islámico en Siria.

   Abú Qatada ha destacado que los periodistas eran "mensajeros de la verdad" que no debían ser asesinados. "Eso es lo que nos enseñó el profeta Mahoma", ha afirmado, según recoge la cadena británica BBC.

   El antiguo dirigente de Al Qaeda ha realizado estas declaraciones durante el juicio al que está siendo sometido por un delito de terrorismo en un tribunal jordano. Abú Qatada fue extraditado por Reino Unido a Jordania en julio de 2013 tras un largo proceso judicial.

   La ejecución de Foley se hizo pública a finales de agosto en un vídeo del Estado Islámico, que la reivindicaba como represalia de los bombardeos estadounidenses sobre las milicias yihadistas en el norte de Irak. Dos semanas después se publicó un vídeo muy parecido con la decapitación de Sotloff.

EXTRADICIÓN DE REINO UNIDO

   Jordania condenó en rebeldía (en ausencia) a Abú Qatada por incitar a los islamistas que perpetraron dos atentados con bomba en 1999 y 2000, aunque, posteriormente, acordó con Reino Unido que se repitiera el juicio.

   Desde 2001, el clérigo radical ha estado entrando y saliendo de prisión en Reino Unido y, en los últimos años, ha estado viviendo sometido a un estricto régimen de libertad vigilada que le impedía el uso de equipos de telecomunicaciones y le imponía arresto domiciliario durante 16 horas al día. El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón consideró en su momento a Abú Qatada (o Abú Qutada) como líder espiritual de Al Qaeda en Europa.

   Jordano de origen palestino, Abú Qatada volvió a ingresar en prisión en marzo de 2013 después de que la Policía encontrara 17 teléfonos móviles, tres dispositivos de memoria USB, cinco dispositivos digitales móviles y 55 CD y DVD regrabables en su domicilio.