Por Karen Brettell
NUEVA YORK, 4 feb, 4 Feb. (Reuters/EP) -
- Los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos subían el martes desde sus niveles más bajos en tres meses, luego de que disminuyera la presión sobre las acciones y los mercados emergentes, lo que redujo la demanda de la deuda del Gobierno de Estados Unidos como refugio.
Los bonos del Tesoro se beneficiaron en la última semana por el flujo de fondos hacia activos de refugio debido a los temores sobre los altos déficits en las economías emergentes y el impacto del recorte del estímulo la Reserva Federal, lo que llevó a los inversores a escapar de algunos activos de riesgo.
Algunos de esos temores parecieron aliviarse el martes, lo que impulsó avances en las acciones y redujo parte de la demanda por deuda del Gobierno de Estados Unidos.
Los precios de los bonos referenciales a 10 años bajaban 12/32 con un rendimiento de 2,63 por ciento, por encima del 2,58 por ciento que marcaban al cierre el lunes. Los rendimientos han caído desde un nivel por encima de 3 por ciento a comienzos de año.
Los bonos a 30 años cayeron 1-5/32 en precio a un rendimiento de 3,60 por ciento, un alza desde el 3,54 por ciento del lunes.
Un reporte el lunes que mostró que la actividad fabril de Estados Unidos fue más débil que lo esperado provocó caídas en Wall Street, sumándose a una ola de ventas que había comenzado con la volatilidad provocada por los inversores que se desprendían de activos en mercados emergentes.
Los inversores están evaluando si los datos decepcionantes se extenderán el viernes, con el esperado reporte de empleo de Estados Unidos de enero.
Los empleadores habrían creado 185.000 nuevos puestos de trabajo en enero, según la estimación mediana de 101 economistas encuestados por Reuters.
Muchos inversores y analistas consideran que es improbable que los datos de empleo lleven a la Reserva Federal frenar la reducción de sus compras de activos, a menos que éstos sean mucho peores que lo previsto.
La Fed recortó la semana pasada sus compras mensuales de bonos en 10.000 millones de bonos, a 65.000 millones. La banca central estadounidense no volverá a reunirse hasta marzo, lo que le dará tiempo para evaluar más datos antes de decidir si continúa reduciendo las compras.
El presidente del banco de la Reserva Federal de Richmond, Jeffrey Lacker, dijo el martes que sería difícil defender una pausa en los recortes al programa.