Publicado 17/03/2014 14:24

RESUMEN-Crimea pide formalmente unirse a Rusia tras el referendo; UE impone sanciones

* Rusia quiere "grupo de apoyo" para que Ucrania sea neutral

* Putin dice que Kiev no protege a los ruso parlantes

* Ejército ucraniano se moviliza

Por Aleksandar Vasovic y Adrian Croft

SIMFERÓPOL/BRUSELAS, 17 mar, 17 Mar. (Reuters/EP) -

- Crimea pidió formalmente el lunes unirse a Rusia, un día después que sus líderes declararan en una votación al estilo soviético que un 97 por ciento de sus ciudadanos apoyaron separarse de Ucrania, en un referendo visto como ilegal por Kiev y Occidente y que provocó sanciones inmediatas de la Unión Europea.

Los ministros de Relaciones Exteriores de la Unión Europea (UE) acordaron el lunes en Bruselas imponer sanciones contra 21 funcionarios de Ucrania y Rusia, dijo el canciller lituano.

Después de una reunión que duró tres horas, los cancilleres de los 28 países miembros acordaron sanciones que incluyen prohibiciones de viajes a los funcionarios y congelamiento de activos por su papel en la toma rusa de Crimea y el referendo del domingo.

El canciller lituano dijo que se tomarán más medidas en los próximos días, cuando líderes de la UE se reúnan en una cumbre en Bruselas. Se espera que expandan la lista a figuras de más alto nivel, cercanas al presidente ruso, Vladimir Putin.

El referendo, que desmembra a Ucrania contra su voluntad, podría desatar la peor crisis entre Oriente y Occidente desde la Segunda Guerra Mundial.

El presidente Barack Obama habló con Putin y le dijo que él y sus aliados europeos estaban listos para imponer "costos adicionales" a Moscú por violar el territorio de Ucrania.

El Kremlin y la Casa Blanca emitieron comunicados en los que decían que Obama y Putin veían opciones diplomáticas para resolver la disputa.

Pero Obama dijo que las fuerzas rusas primero deben poner fin a las "incursiones" en su ex vecino soviético, mientras Putin renovó su acusación de que los nuevos líderes ucranianos, que llegaron al poder por un levantamiento que destituyó al presidente pro ruso el mes pasado, no estaba logrando proteger a los rusoparlantes de los nacionalistas violentos ucranianos.

Moscú respondió a la presión occidental pidiendo un "grupo de contacto" internacional para que medie en la crisis.

El "grupo de apoyo" de países también instaría a Ucrania a adoptar una nueva Constitución que diera mayores poderes a las regiones del país, y requeriría a Ucrania que mantuviera neutralidad política y militar.

Un recuento completo preliminar de la votación del domingo mostró que el 96,77 por ciento de los votantes optaron por unirse a Rusia, según anunció en televisión el presidente de la comisión de gobierno regional que supervisaba el referendo, Mikhail Malyshev.

Las autoridades dijeron que la participación fue del 83 por ciento. En Crimea viven 2 millones de personas.

Los miembros de las minorías ucraniana y tártara dijeron que boicotearían la consulta, celebrada sólo tres semanas después de que las fuerzas rusas tomaran el control de la península, donde tiene su base la flota rusa del Mar Negro.

Putin, cuya popularidad en casa se ha visto impulsada por su actuación en Crimea a pesar de los riesgos para su economía, realizará una sesión conjunta extraordinaria del Parlamento ruso sobre Crimea el martes, dijo su representante en la Cámara baja.

Moscú defendió la anexión de Crimea, que tiene una mayoría de población rusa, citando el derecho de proteger a "ciudadanos pacíficos". El Gobierno interino de Ucrania ha movilizado tropas para defenderse contra la invasión de su territorio oriental, donde manifestantes pro rusos se han visto implicados en enfrentamientos letales en los últimos días.

El Parlamento ucraniano apoyó el lunes un decreto presidencial para una movilización militar parcial para convocar a hasta 40.000 reservistas.

El riesgo de una mayor incursión rusa ha dejado a la OTAN preguntándose cómo ayudar a Kiev sin provocar lo que algunos ucranianos llaman la "Tercera Guerra Mundial".

(Traducido por Raquel Castillo en la Redacción de Madrid; Editado por Lucila Sigal en la Mesa de edición de Santiago de Chile)