Foto: YOUTUBE
MÉXICO DF, 22 Feb. (Notimex/EP) -
El juzgado Cuarto de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales de México ha dictado prisión contra el miembro del cártel de Sinaloa Daniel Fernández Domínguez, apodado 'El Pelacas', quien era colaborador de Joaquín 'El Chapo' Guzmán.
El Consejo de la Judicatura Federal ha informado de que 'El Pelacas' es culpable de los delitos de portación de cartuchos de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, así como de posesión de armas de fuego sin licencia. Además, está siendo investigada su presunta implicación en el secuestro en 1994 del excandidato presidencial por el Partido de Acción Nacional (PAN) Diego Fernández de Cevallos.
Fernández Domínguez se encuentra recluido desde el pasado 12 de febrero en el Centro Federal de Readaptación Social 'Altiplano', ubicado en el municipio Almoloya de Juárez, en el estado de México.
'El Pelacas' inició su carrera criminal con el grupo criminal 'Los Zetas', y más tarde pasó a formar parte del cártel de Sinaloa. Antes de ser capturado era jefe de una célula denominada 'La Oficina' que operaba en el estado de Aguascalientes, en el centro-norte de México.
Fernández Domínguez habría sido mencionado el pasado 15 de agosto de 2011 como autor del secuestro, en las declaraciones que realizó Óscar Osvaldo García Montoya, líder del grupo delictivo 'La Mano con Ojos', ante el entonces procurador general de justicia del Estado de México, Alfredo Castillo Cervantes.
EL SECUESTRO
Diego Fernández de Cevallos, abogado y político mexicano, conocido popularmente como 'El Jefe Diego', fue secuestrado en su rancho del municipio de Pedro Escobedo el 14 de mayo de 2010. Su liberación se produjo el 26 de noviembre de este mismo año previo pago de un rescate superior a los 20 millones de dólares.
Poco después de conocerse el secuestro del 'Jefe Diego', el presidente del país en aquel momento, Felipe Calderón, difundió un mensaje a toda la nación en el que transmitía su ánimo al político y a sus familiares, abanderando una condena internacional a la que también se sumó el entonces presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero.
La semana pasada, Fernández de Cevallos pidió a las autoridades que cumplan con la ley, investiguen la verdad y sancionen a los culpables, pero dijo que ha perdonado a sus captores. "Mi secuestro terminó cuando me liberaron y desde entonces para mí, como creyente, está todo perdonado", señaló.