MÉXICO DF, 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los representantes del Gobierno de México en el Senado han asegurado este jueves en la Cámara Alta que la nueva reforma fiscal solo repercutirá en las economías más boyantes del país, las cuales representan el 10 por ciento de la población.
La nueva medida económica del Gobierno del Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha sido muy cuestionada debido a la importante subida de impuestos que van a experimentar muchos productos, entre ellos algunos alimentos de primera necesidad, como el pan, según ha publicado el diario mexicano 'Milenio'.
"Lo relevante de la reforma es que no toca al 90 por ciento de los mexicanos, trae implícito un intento de redistribución en beneficio de los que menos tienen", ha afirmado el senador del PRI Emilio Gamboa, quien ha resaltado la inviolabilidad de las grandes mayorías desde hace mucho tiempo.
En ese sentido también se ha expresado el presidente de la Comisión de Hacienda, José Yunes, quien ha subrayado que lo más relevante de la reforma es distribuir de manera más justa el crecimiento que experimente el país. Al mismo tiempo, ha expresado "la firme convicción" del PRI para convertir esta medida en "un antes y un después" hacia el desarrollo y la lucha contra la desigualdad en México.
A pesar del optimismo del Gobierno, algunas fuerzas políticas mexicanas han criticado fuertemente la reforma. Es el caso del Partido Acción Nacional (PAN), quien desde el Senado han apuntado en varias ocasiones la "gravedad política" que supone subir los impuestos, pues ello no solo afectará a la economía de las familias, sino también a la generación de empleo y a la entrada de inversiones.
REFORMA FISCAL
La reforma fiscal, aprobada a finales del pasado mes de octubre con 299 votos a favor y 160 en contra, busca elevar la recaudación tributaria del país en 1,4 por ciento del PIB en 2014 para llegar paulatinamente hasta cerca de un 3 por ciento del PIB en 2018. Pero con las modificaciones hechas por los diputados la recaudación para 2014 sería de un 1,1 por ciento del PIB y de menos del 2,7 por ciento para 2018, según la Secretaría de Hacienda.
La reforma fiscal es la piedra angular del paquete de medidas que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, ha puesto sobre la mesa para dinamizar la economía mexicana. El Gobierno asegura que su objetivo es financiar con los impuestos mejores programas sociales para erradicar la pobreza.