Actualizado 21/06/2016 14:01

Acapulco quiere volver a ser un gran destino turístico

   MADRID, 10 Sep. (Lara Lussón - Notimérica) -

   El narcotráfico y la corrupción lo cambian todo. Cambian el modo en que vive la sociedad, que se ve envuelta en esa guerra que libran traficantes, policías, políticos y empresarios. Quién le iba a decir a la ciudad de Acapulco en los años ochenta, cuando se posicionaba como uno de los destinos de sol y playa favoritos de los europeos, que unas décadas después iba a ver su nombre asociado a asesinatos, muerte, drogas e inseguridad.

   Eso es precisamente lo que quiere cambiar Evódio Velázquez, un político que presume de ser de izquierdas y que el próximo uno de octubre tomará posesión de su cargo como presidente de la ciudad de Acapulco.

   Quiere devolver a su ciudad esa proyección turística; pero no solo eso. Pretende invertir en infraestructura, en movilidad... pero fundamentalmente en seguridad. Es su gran obsesión y así lo ha dejado claro en un encuentro con periodistas que se ha celebrado este jueves en Madrid en el marco de una gira que Velázquez está realizando junto a su equipo de Gobierno por Europa y Estados Unidos en la que se está reuniendo con alcaldes, empresarios del sector hotelero y posibles inversores.

    "El reto es cambiar la percepción de ese Acapulco de inseguridad y violencia", ha expresado nada más comenzar el acto, consciente de que ambas cosas son el lastre más pesado al que se enfrentará en los próximos cuatro años de mandato. "Queremos relanzar la ciudad como destino turístico, mejorar el nivel de vida de nuestros ciudadanos y lograr tener una ciudad sostenible, moderna y competitiva".

   Para ello se ha reunido entre otros con los alcaldes de Miami o Medellín, ejemplos hoy en día de ciudades integradoras que en su momento enfrentaron temas de violencia tan importantes como el que hoy vive esta capital del estado de Guerrero. Velázquez insistie: "No queremos ser el Acapulco de las notas rojas en la prensa, queremos reposicionar una imagen internacional buena".

PROGRAMA 'ESCUDO ACAPULCO'.

   Es la niña bonita del programa de relanzamiento de la ciudad. Si bien son importantes las inversiones que se están llevando a cabo en materia de mejora de las infraestructuras, de las carreteras y vías comerciales, la reutilización de los puertos como parada de cruceros por el Pacífico, o los esfuerzos que se están haciendo para recuperar los vuelos directos desde Europa y Estados Unidos a esta capital, el programa 'Escudo Acapulco' es sin duda el más ambicioso de todos los proyectos. Porque sin seguridad no habrá inversión ni turismo. Y sin esos pilares no habrá desarrollo ni crecimiento.

   El recién elegido presidente no oculta su preocupación por este hecho y prueba de ello es la implementación de manera inmediata de este programa que consistirá en renovar el cuerpo de Policía, en instalar más de 1000 cámaras fundamentalmente en las zonas turísticas y en proteger bien todas aquellas zonas que sean de interés turístico o cultural.

PALIZA MEDIÁTICA.

   Sin perder de vista las dificultades que enfrenta, Velázquez ha tratado de romper una lanza en su favor explicando que muchos de los crímenes que se cometen en el estado de Guerrero se le atribuyen directamente a Acapulco porque "es la ciudad conocida", pero asegura que realmente su ciudad no es tan peligrosa como se cree en el extranjero.

   De hecho, el turismo mexicano no ha caído nunca y este verano se ha llegado a una ocupación hotelera del 85% de media. "¿Ustedes creen que si fuera una ciudad insegura estaría cada fin de semana llena de familias con sus hijos?", se pregunta. "Somos víctimas de una paliza mediática de la que no se puede culpar a la prensa, pero ahora venimos a pedirles, con toda la humildad del mundo, que proyecten la imagen de la que será una ciudad moderna y acogedora", ha concluido.