BRASILIA, 12 Ago. (Notimérica) -
El Senado brasileño aprobó este jueves el proyecto de decreto legislativo por el cual convierte en ley las reglas establecidas en el Acuerdo de París, firmado por Brasil y otros 194 países en la capital francesa a finales del año pasado. Dicho acuerdo tiene como objetivo la reducción de los efectos del cambio climático.
El tratado, que tiene fuerza de ley internacional y plantea obligaciones y recomendaciones para todos los países firmantes, entrará en vigor después de que al menos 55 estados, responsables como mínimo de un 55 por ciento de emisiones globales, ratifiquen el texto.
Para lograr ese objetivo, el tratado establece metas individuales de cada país para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, que en el caso de Brasil consiste en la reducción de un 37 por ciento hasta 2025 y en hasta un 43 por ciento hasta 2030, tal y como recoge 'Agencia Brasil'.
Además, dicho acuerdo establece que hasta 2025 las naciones desarrollados deberán transferir un mínimo de cien mil millones de dólares anuales a los más pobres para financiar acciones contra la contaminación. También, el Acuerdo de París propone limitar el alza de la temperatura "muy por debajo de los 2 grados centígrados" y "proseguir con los esfuerzos para limitar el alza de la temperatura a 1,5 grados centígrados".
El acuerdo fue ratificado por Brasil a poco más de un mes de la reunión de líderes mundiales sobre el tema, que se celebrará el 21 de septiembre en Nueva York y a la cual asistirá Brasil.
En la reunión con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las autoridades brasileñas deberán detallar las metas para reducir las emisiones de gas a partir de 2020, cuando empiezan a funcionar las normas del Acuerdo de París, en sustitución a las reglas del Acuerdo de Kioto.
Brasil tiene retos tanto en agricultura como en el sector energético. En el primer sector, el objetivo del país es restaurar y reforestar un área de 12 millones de hectáreas, además de aumentar en 5 millones de hectáreas el sistema de integración de cultivos, ganadería y bosque.
Respecto al sector energético, el objetivo es aumentar al 18 por ciento el uso de biocombustibles sostenibles. Para ello Brasil planea utilizar un 45 por ciento de energías renovables, de las cuales 28 por ciento y 33 por ciento provienen de fuentes no hídricas, incluidas la energía eólica y la solar.