Actualizado 28/08/2007 17:36

Argentina.- La candidata presidencial Elisa Carrió, absuelta en un juicio por calumnias


BUENOS AIRES, 28 Ago. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -

La candidata presidencial de la Coalición Cívica Elisa Carrió resultó absuelto en la noche del lunes del juicio por calumnias e injurias que le había iniciado un empresario pesquero, quien había pedido que fuera condenada a un año y medio de prisión.

El juez Luis Schelgel declaró inocente de todos los cargos a la líder del ARI, quien lloró al escuchar el veredicto, después de que el público de la sala de audiencias donde se desarrolló el proceso estallara en gritos de alegría.

El empresario Héctor Antonio, hijo del fallecido dirigente peronista Jorge Antonio, demandó a Carrió porque lo acusó de haber instigado un asesinato cometido en 2003, que todavía hoy sigue impune.

Carrió denunció que "la mafia de la pesca" estaba detrás de la muerte del empresario Raúl Espinosa, asesinado por un sicario en la ciudad patagónica de Puerto Madryn, provincia de Chubut.

La dirigente sostuvo que la esposa de Espinosa le dijo que el homicidio tenía un "móvil económico", que era quedarse con acciones de la empresa pesquera San Isidro, que Espinosa no quería vender.

Los interesados eran Antonio y el empresario español Juan Alvarez Castellanos, dueño de la pesquera Conarpesa, quienes finalmene compraron parte de la empresa de Espinosa.

"Si uno no habla en la Argentina de la impunidad, uno es cómplice por silencio. ¿Qué iba a hacer yo? ¿Me iba a callar para no tener la represalia de la querella de los amigos del poder?", dijo Carrió.

"En Argentina debo ser la primera líder política que está sentada en el banquillo de los acusados. Los responsables del saqueo de la república no fueron nunca siquiera citados. Yo elegí estar acá. Yo elijo dar testimonio aunque tenga que pagar con la cárcel", agregó.

Dijo también que "el querellante mintió. Dijo que él no había comprado esas acciones. Pedimos las constancias del expediente y debió reconocer que sí, que las había comprado como un favor a Juan Alvarez".