Actualizado 21/03/2016 20:09

Argentina y EEUU volverán a compartir datos para luchar contra el crimen organizado

   BUENOS AIRES, 21 Mar. (Reuters/Notimérica) -

Argentina y Estados Unidos han firmado este lunes un acuerdo para volver a compartir información financiera con el fin de combatir el crimen organizado. El flujo de datos se interrumpió el año pasado por la filtración a la prensa de datos suministrados por el país norteamericano referidos al caso del fallecido fiscal Alberto Nisman.

   La firma del acuerdo es otra señal de acercamiento de la Casa Blanca al Gobierno de Mauicio Macri a dos días de la visita a Argentina del presidente estadounidense, Barack Obama, y es clave para investigar el lavado de dinero que puede suceder a delitos como narcotráfico, terrorismo o trata de personas.

   "Pusimos como prioridad estratégica restablecer este vínculo con Estados Unidos por tratarse del principal productor de inteligencia financiera a nivel global", ha señalado durante un encuentro con periodistas el jefe de la Unidad de Información Financiera (UIF) de Argentina, Mariano Federici.

   "No tener la colaboración solamente podía beneficiar al crimen organizado o a corruptos o incluso potencialmente también a terroristas", ha añadido.

   La cooperación entre los dos países había concluido después de que los datos suministrados por Estados Unidos referidos al caso del fallecido fiscal Alberto Nisman se filtraron a la prensa argentina el año pasado, una fuga de información que el actual Gobierno atribuye a la administración de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

   Las nuevas autoridades argentinas, que asumieron en diciembre, argumentan que el anterior Gobierno de centroizquierda había hecho un uso político de la UIF, difundiendo información confidencial para perjudicar a opositores.

   "Todos los crímenes más significativos que ocurren en este momento en el mundo son esencialmente transnacionales. Los estados no pueden resolverlos por sí solos. El ataque al narcotráfico es imposible hacerlo si no tenemos un flujo de información adecuado", ha argumentado la canciller argentina, Susana Malcorra.