Actualizado 18/07/2013 20:09

Argentina.- El exsecretario de Transporte Jaime está en el país, pero podría escapar fácilmente, según su abogado


BUENOS AIRES, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

El exsecretario de Transporte Ricardo Jaime, prófugo tras decretarse su ingreso a prisión, se encuentra en Argentina, pero podría escapar sin "mucho esfuerzo", según ha declarado uno de sus abogados, Andrés Marutian.

El abogado ha confirmada que el exsecretario se encuentra en el país y ha destacado que en Argentina es fácil huir porque "con ir a ver las Cataratas del Iguazú y tomarse el bus de los turistas, a los tres segundos ya se está en otro país", aunque ha señalado que esta no es la intención de Ricardo Jaime.

"Jaime viajó tres veces a Brasil durante estos cuatro años desde que renunció a su cargo", ha destacado el abogado, explicando que si hubiese querido escaparse ya lo habría hecho, según ha recogido el diario argentino 'La Nación'.

Marutian ha insistido en que Jaime aguardará la decisión del Tribunal Federal de Apelaciones respecto a la prisión preventiva dictada por el juez Bonadio, tras las apelación de la defensa, que considera que el magistrado actuó "con autoritarismo y con una perversidad absoluta", sin atender a la legalidad.

ÓRDENES DE DETENCIÓN

Sobre Jaime pesan dos órdenes de detención. El juez Bonadio dictó la orden de prisión a raíz de la aparición de una carta firmada por el ex secretario y dirigida al presidente de la empresa SOESA, que administraba el ferrocarril Belgrano Cargas.

En otra misiva, la Secretaría de Transporte indica que las obras que debían realizarse en el tendido de las vías entre Tucumán y Concepción debía de ser de 8 millones de pesos (1,1 millón de euros). Sin embargo, después de que Jaime enviara la carta a la empresa, al final la compañía acabó pagando un sobrecoste de 2 millones de pesos (280.000 euros).

El juez Bonadio consideró que existía riesgo de fuga y de obstrucción a la justicia por parte de Jaime, por lo que decidió firmar la orden de prisión. La otra causa, cuyo juicio debía empezar en dos semanas, se trata de un caso de ocultación de pruebas.