BUENOS AIRES, 30 Nov. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -
La presidenta electa de Argentina, Cristina Fernández, decidió mantener en sus cargos a los jefes de las tres Fuerzas Armadas que acompañaron hasta ahora a su marido, el presidente Néstor Kirchner, cuando asuma su mandato el próximo 10 de diciembre.
El anuncio sobre la continuidad de las cúpulas militares fue realizado en la noche del jueves por la ministra de Defensa, Nilda Garré, durante una rueda de prensa en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo.
Garré conservará su puesto en el Gobierno de Fernández y acaba de sortear una crisis al ordenar el pase a retiro del jefe de Inteligencia del Ejército, general Osvaldo Montero, tras conocerse conversaciones telefónicas en las que hablaba mal de su jefa.
Según esas grabaciones, Montero habría sugerido que el actual ministro del Interior, Aníbal Fernández, y próximo ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, se hiciera cargo de la cartera de Defensa, en el próximo mandato.
Garré anunció después de reunirse con la presidenta electa que seguirán en sus puestos el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, brigadier general Jorge Chevalier; del Ejército, teniente general Roberto Bendini; de la Armada, almirante Jorge Godoy; y de la Fuerza Aérea, brigadier general Normando Costantino.
La ministra informó también de que fue designado al frente de la Casa Militar de la Presidencia el coronel Alejandro Graham, mientras que el actual jefe de la Casa Militar, coronel Gustavo Giacosa, asumiría como agregado militar en Uruguay.
Garré también anunció que durante la presidencia de Cristina Fernández los edecanes militares, asistentes personales del primer mandatario, serán mujeres que provendrán de los escalafones profesionales de las tres fuerzas armadas.