BUENOS AIRES, 17 Sep. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -
El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, negó hoy que se haya desatado en la Argentina un "proceso inflacionista creciente" y descartó que en el Ejecutivo exista malestar con el presidente del Banco Central, Martín Redrado, después de que éste admitiera la semana pasada su preocupació por la suba de precios.
Fernández sostuvo que la Argentina "tiene la inflación que debe esperarse" por el nivel de crecimiento de su economóa y sostuvo que "lo que ha dicho (Redrado) no es muy distinto" a lo que él mismo ha declarado, afirmó el jefe de gabinete en declaraciones radiofónicas.
La semana pasada, en una conferencia organizada por la publicación Euromoney, Redrado había dicho que "el Banco Central está profundamente preocupado por el nivel actual de la inflación en la Argentina". "No hay motivos para la complacencia. Se debe mantener un buen trabajo continuo entre las políticas fiscales, salariales, monetarias y de la competencia para hacer avances sostenidos y rápidos en los próximos años", agregó el presidente del Banco Central.
Según las mediciones oficiales, la inflación crece a un ritmo de un 9 por ciento anual, aunque analistas privados consideran que los precios aumentaron, al menos, el doble de esa cifra, en medio de la crisis que soporta el Indec, el organismo oficial de estadísticas.
El proyecto de presupuesto para el año próximo, remitido la semana pasada por el Gobierno al Parlamento para su discusión, prevé una inflación de entre el 7 y el 8 por ciento y una tasa de crecimiento de la economía local de un 4 por ciento.