Líderes agrarios esperan con escepticismo la reunión en la que plantearán el tema de las retenciones a las exportaciones de soja
BUENOS AIRES, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Argentina espera concretar un acuerdo con los productores agrícolas en la ronda de diálogos que comienza hoy, en el marco de las negociaciones que la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, ha comenzado con los sectores político, económico y social del país, tras la derrota en los comicios legislativos del pasado 28 de junio.
Al diálogo fueron convocados todos los miembros de la Comisión de Enlace integrada por los presidentes de las organizaciones La Rural, Hugo Biolcati; Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Mario Llambías; de Coninagro, Carlos Garetto; y de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, recibirá a las 16.00 horas (21.00 en la España peninsular) a los dirigentes de las entidades que componen la Comisión de Enlace agropecuaria. La reunión se celebrará en la Casa Rosada --sede del Ejecutivo-- sin que hasta el momento Fernández de Kirchner haya confirmado su participación.
Fernández insistió que se trata de un encuentro "sin agenda previa", pues la idea es "sentarse y escuchar" los planteamientos del campo. "Ojala podamos ponernos de acuerdo en todos los temas. Quiero encontrar una salida", indicó.
Esta es la primera vez en varios meses que el Gobierno se sienta con el sector rural, el cual ha protagonizado fuertes movilizaciones desde hace poco más de un año cuando el Ministerio de Economía anunció cambios en los tributos por las exportaciones de algunos granos.
RETENCIONES
Aunque el Gobierno ha aclarado que será una reunión sin agenda, los líderes agrarios han anunciado que uno de los temas que plantearán este viernes será el de las retenciones, en especial a la soja, considerando que Argentina es el tercer productor mundial de esta leguminosa.
Los productores quieren que sean anuladas las alícuotas a las exportaciones de trigo y maíz y se bajen además en 10 puntos --al 25 por ciento-- las de la soja. Para el Estado esto tendría un costo de 3.180 millones de dólares (2.230 millones de euros), por lo que Fernández adelantó que sería "muy complicado" acceder a esta petición.
"El tema es muy complicado ya que antes de hablar de bajas y de tocar un centavo hay que ver de dónde sacar la plata (el dinero)", dijo en declaraciones a la radio local.
Los conflictos entre el campo y el Gobierno argentino se agudizaron en marzo de 2008 cuando el Ministerio de Economía anunció el aumento de las exportaciones de granos, incluyendo la soja, cuyas siembras ocupan más del 50 por ciento de la superficie cultivada.
Las principales organizaciones agrarias y ganaderas comenzaron una huelga que se extendió durante más de cuatro meses y que generó fuertes protestas en todo el país, lo que afectó el abastecimiento de alimentos en las principales ciudades argentinas.
ESCEPTICISMO
Por su parte, los productores agrarios han mostrado cierto escepticismo por este encuentro, aunque han admitido que están a la expectativa de poder avanzar en algunos temas. Buzzi, de la FAA, ha dicho que espera que esta ronda de diálogos "sea el punto de partida para resolver dos años de desencuentros".
"Hay enormes desconfianzas con este gobierno", dijo Buzzi, al aclarar que en ningún momento han querido conformar una especie de bloque contra el Gobierno. "Somos representantes del campo no de la oposición política", subrayó.
En la misma línea se encuentra Biolcati, de la CRA, quien destacó que existe "mucho escepticismo" aunque reconoció que en este momento "hay un nuevo escenario" en el que "quizás se puede empezar a trabajar con mayor seriedad".