Actualizado 01/09/2006 18:30

Argentina.- Una marcha contra la inseguridad se convierte en un desafío para Kirchner


BUENOS AIRES, 1 Sep. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -

El Gobierno del presidente Néstor Kirchner tuvo su mayor desafío ayer en un multitudinario acto convocado por Juan Carlos Blumberg, cuyo unico hijo fue secuestrado y asesinado en 2004, para pedir más medidas para combatir la inseguridad, uno de los principales temas de preocupación de los argentinos.

El acto realizado en el tradicional paseo de la Plaza de Mayo, congregó a 180.000 personas según el propio Blumberg, aunque otras estimaciones sostienen que los asistentes serían la mitad, mientras que el Gobierno y la policía no dieron cifras.

Más allá de las diferentes estimaciones, el acto de anoche fue el de mayor convocatoria en los últimos años. Un número parecido de asistentes se congregó en abril de 2004 en la plaza situada frente al Palacio de Justicia en el primer acto organizado por Blumberg.

El poder de convocatoria del ingeniero Blumberg, convertido en un referente social tras la muerte de su hijo Axel, llamó la atención de los partidos políticos: el PRO que lidera el diputado y presidente de Boca Juniors Mauricio Macri, ya le ofreció ser candidato en las elecciones del año próximo.

Blumberg se negó ayer a responder si aceptaría una candidatura cuando fue consultado por los periodistas, cuando el acto había finalizado sin incidentes y una multitud se desconcentraba en orden, pese a los temores que se habían generado por las presiones del Gobierno.

El subsecretario de Tierras, Luis D'Elía había convocado a "una

contramarcha" frente al Obelisco de la ciudad, a unas diez manzanas de la Plaza de Mayo, pero su convocatoria, junto a la del Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel no superó las 5.000 personas.

Blumberg propone bajar la imputabilidad para los menores, crear una policía unificada para todo el país y restringir las excarcelaciones, entre otras medidas que son criticadas por organismos de defensa de los de Derechos Humanos.

También se critica a Blumberg que sea asesorado de temas penales por ex funcionarios de la dictadura militar (1976-1983) y que a su fundación se hayan sumado ex militares y ex policías sospechados de violaciones a los Derechos Humanos.