Actualizado 03/01/2012 04:03

Argentina reivindica su soberanía sobre las islas en su 179º aniversario


BUENOS AIRES, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Argentina ha reivindicado este martes su "imprescriptible derecho de soberanía" sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, así como sobre los espacios marítimos circundantes, cuando se cumple el 179º aniversario de su "ocupación ilegal" por parte de Reino Unido, según ha informado el Ministerio de Exteriores a través de un comunicado.

Argentina ha recordado que el 3 de enero de 1833 Reino Unido ocupó las islas y desalojó a la población y a las autoridades "legítimamente establecidas", "reemplazándolas por súbditos de la potencia ocupante", en un "acto de fuerza ilegítimo" que el país sudamericano "protestó inmediatamente".

Además, ha denunciado que "la ilegítima ocupación británica" de las islas "se ve agravada por un provocativo y continuado desprecio al Derecho Internacional" por la "persistente renuencia" de Reino Unido a reanudar las negociaciones sobre soberanía, conforme a lo establecido en la resolución 2065 de la Asamblea General de Naciones Unidas, refrendada por nueve resoluciones posteriores.

En la misma línea, Argentina ha denunciado "el constante desarrollo de actividades ilegítimas en la zona disputada" por parte de Reino Unido, que incluyen la realización de ejercicios militares con lanzamiento de misiles desde su base en el Atlántico Sur, "invocando falsas necesidades de defensa", así como la expoliación de los recursos naturales renovables y no renovables.

A pesar de ello, Argentina ha reiterado su "permanente y sincera" disposición a reanudar las negociaciones sobre soberanía con Reino Unido "para hallar una solución pacífica y definitiva a la disputa", poniendo fin "a una situación anacrónica, incompatible con la evolución del actual mundo post colonial".

A este respecto, el país ha indicado que la reanudación de las negociaciones es un reclamo de la comunidad internacional, especialmente de los países latinoamericanos y caribeños, que en las últimas cumbres regionales han expresado su rechazo a la presencia militar británica en el Atlántico Sur, aunque también de los países árabes, africanos y asiáticos, entre ellos China.