Actualizado 03/04/2006 20:17

Argentina/Uruguay.- Ecologistas tomarán medidas esta semana si sigue estancada la negociación de las papeleras


BUENOS AIRES, 3 Abr. (EP/AP) -

Representantes de la denominada Asamblea Ambiental de la ciudad ribereña de Gualeguaychú, en Uruguay, y que se opone a la construcción de las dos plantas de celulosa, a su juicio contaminantes, en la margen del río fronterizo con Argentina, --el Río Uruguay--, advirtió hoy de que adoptará medidas desde este mismo miércoles, si sigue estancada la negociación entre los gobiernos de Buenos Aires y Montevideo sobre el tema.

Aunque ambos gobiernos expresaron su voluntad de llegar a un acuerdo negociado, posteriormente surgieron desencuentros que obligaron a postergar, --según datos de ambos Gobiernos sin fecha--, el encuentro que los presidentes Néstor Kirchner y Tabaré Vázquez proyectaban celebrar el pasado miércoles 29 de marzo junto a ciudad uruguaya de Colonia.

Por su parte, la cancillería argentina espera en estos momentos la respuesta uruguaya a un borrador de acuerdo con precisiones sobre medidas que las empresas de celulosa deberían adoptar para disipar los temores de ecologistas y comunidades locales de la zona de que causarán daños irreparables al Medio Ambiente.

En una reunión celebrada anoche, la Asamblea aprobó una resolución en la que señalaban: "Nuestro gesto, nuestra cautela y nuestro tiempo de espera sin respuestas se agotan este miércoles". En la fecha mencionada y ante la falta de acuerdo de los Gobiernos, "pondremos en marcha un plan de estrategias oportunamente planteadas".

Aunque no se especifica a que plan o estrategias se refieren, este grupo, junto a habitantes de Gualeguaychú, bloquearon durante más de 40 días la ruta y el puente que conduce a la ciudad uruguaya de Fray Bentos, donde la finlandesa Botnia y la española ENCE han comenzado las obras de construcción de sendas plantas de pasta de celulosa.

Según recordaron, Naciones Unidas consideran esa industria como una de las más contaminantes del Medio Ambiente.

Pese a que los ecologistas de Gualeguaychú y los de Colón, --otra ciudad ribereña argentina que también se vería afectada por estas industrias--, aceptaron levantar el bloqueo del puentes a petición del gobierno de Kirchner para emprender una negociación con Uruguay, la contraprestación uruguaya para esa negociación, --que consistía en la suspensión de tareas en las plantas papeleras durante un máximo de 90 días--, parece no haberse cumplido.

Botnia informó el pasado fin de semana a los empleados y personal que trabajaba en la zona de que la suspensión de las obras sería finalmente de sólo una semana. Ayer, el gobernador de la Provincia argentina de Entre Ríos, Jorge Busti, en cuya jurisdicción se encuentran Gualeguaychú y Colón, exhortó a las asambleas de ambas ciudades a "mantener la calma".

El gobernador dijo que algunos sectores uruguayos "están buscando la provocación o una reacción por parte de Argentina que evite cualquier negociación". "De otra manera no se entiende la posición de la empresa Botnia", agregó.