Actualizado 22/07/2009 00:55

Asentamientos israelíes son "suicidio político":aliado de Merkel

BERLIN (Reuters/EP) - Un importante miembro del partido conservador de la canciller alemana Angela Merkel instó a Israel a no continuar con la construcción de asentamientos, advirtiendo que arriesga un suicidio político si sigue con su plan.

En comentarios inusualmente fuertes para un político alemán, Ruprecht Polenz, jefe de la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento, fue citado diciendo que la búsqueda de Israel de fronteras más seguras sólo sería posible con una solución a dos estados.

Si Israel no detiene su construcción de asentamientos, puede arriesgar "cometer suicidio gradual como Estado democrático", precisó Polenz al periódico Rheinische Post.

Disfrutar de fronteras seguras sólo sería concebible para Israel si Jerusalén del Este pudiese funcionar como la capital de un Estado palestino, indicó Polenz.

Sin embargo, agregó que Israel está intentando separar a Jerusalén del Este de Cisjordania por medio de la construcción de más asentamientos.

"Israel está pasando por alto el hecho de que ni los palestinos ni los estados árabes acordarán una solución sin Jerusalén del Este", comentó Polenz al periódico.

Políticos alemanes, que sienten que tienen una especial obligación con el país debido al Holocausto Nazi en el cual seis millones de judíos fueron asesinados, usualmente tienden a suavizar más sus críticas hacia Israel que otros países.

Separadamente, la presidencia de la Unión Europea -actualmente a cargo del mandatario de Suecia- instó a Israel a evitar desalojar a palestinos y demoler sus hogares en el territorio árabe de Jerusalén del Este, donde miles son amenazados con el desalojo.

Un reporte de la ONU en mayo precisó que cerca de 1.500 órdenes de demolición de hogares construidos sin el permiso de la municipalidad israelí de Jerusalén estaban pendientes en el este de la ciudad.

El mandatario sueco dijo que tales acciones son ilegales bajo la ley internacional y pidió terminarlas.

"Estas notificaciones de desalojo siguen a otras órdenes recientes que afectan adversamente a los palestinos que viven en Jerusalén del Este y, conjuntamente con el aumento de la actividad en asentamientos en Jerusalén del Este, amenazan mayormente las posibilidades de paz", agregó.

Israel considera a Jerusalén como su capital, incluyendo a Jerusalén del Este, territorio que fue tomado en 1967 y anexado al país en una maniobra no reconocida internacionalmente. En tanto, los palestinos quieren convertir a Jerusalén del Este en la capital de su futuro Estado.