Actualizado 23/03/2006 14:55

Bolivia/Chile.-Los autores de los atentados pretendían atacar el Consulado chileno en La Paz, según la policía boliviana


LA PAZ/SANTIAGO, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

Uno de los terroristas detenidos y principal acusado de provocar los dos atentados registrados el martes en La Paz, tenía planeado atacar este sábado el Consulado de Chile en Bolivia, según informó el comandante de la policía boliviana, el general Isaac Pimentel.

Al parecer, la policía encontró esa información en una agenda del ciudadano estadounidense Lestat Claudius de Orleáns, quien admitió ser autor de las explosiones en los hoteles Linares y Riosinho II, que dejaron un saldo de dos muertos y casi una docena de heridos.

"Este sujeto es un experto en explosivos", aseguró ayer Pimentel, mientras el viceministro del Interior, Rafael Puente, lo calificó como "un psicópata que tenía la intención de matar por lo menos a unas 200 personas", informa la prensa local.

Tanto De Orleáns como Montevideo, un californiano de 27 años, habían cometido en Bolivia, antes de su detención ayer, varios delitos en el país y según la Policía, su "perfil psicópata lo llevaría a cometer acciones criminales sin sentir culpa".

Sin embargo, el presidente boliviano, Evo Morales, insinuó ayer que Estados Unidos envía terroristas a su país tras la detención del ciudadano estadounidense acusado de los dos atentados en La Paz. "¿Hay lucha contra el terrorismo del Gobierno de Estados Unidos o nos manda a norteamericanos a hacer terrorismo en Bolivia?", se preguntó.

En mayo de 2005 llegó a Bolivia por Villazón, frontera argentina, desde donde se dirigió a Potosí para adquirir un número importante de cartuchos de dinamita, con los que se trasladó a Sucre y desde allí envía a Uruguay un paquete con ocho cartuchos y una nota amenazante.

El destinatario era un juez de apellido Barrera. El paquete nunca llegó a destino porque la policía antidroga logró detectar su contenido, según informa el diario de Santiago El Mercurio, recogido por Europa Press.

En junio de 2005, en la Quiaca (Argentina) fue detenido por la policía local junto a su compañera, Alda Ribeiro Acosta, bajo los cargos de actos terroristas cometidos contra un cajero automático del 'Banco Macro'.

En diciembre de ese mismo año fue puesto en libertad y en febrero de 2006 regresó a Bolivia. Viajó al santuario de Copacabana, en el departamento de La Paz, y de allí prosiguió camino hacía la zona de Cazani, en la frontera Bolivia-Perú.