LA PAZ, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente boliviano, Evo Morales, ha invitado a su homólogo chileno, Sebastián Piñera, a la inauguración en territorio boliviano de la carretera que cruza Sudamérica, que, a partir del próximo 5 de abril, unirá Perú y Brasil, una invitación que llega tras los últimos enfrentamientos.
"Era difícil pensar en invitar al presidente de Chile a esta inauguración. Frente al reclamo a la Cancillería (chilena), pues vamos a invitar, no somos excluyentes y aprovecharé esta reunión para invitarlo para que esté el día 5 de abril en esta inauguración del camino bioceánico entre Perú hacia Brasil", ha explicado a una televisión desde Venezuela.
Morales se encuentra actualmente en Caracas, a donde llegó el martes por la noche tras la muerte del presidente venezolano, Hugo Chávez, y donde está previsto que este viernes participe en el funeral del mandatario. A esta ceremonia, también acudirá Piñera.
El Ministerio de Exteriores chileno protestó ante el Gobierno brasileño por su negativa a invitar al Ejecutivo chileno a la inauguración de la autovía interocéanica, a la que sí están invitados los jefes de Estado de Perú y Brasil, Ollanta Humala y Dilma Rousseff, respectivamente.
La nueva vía unirá los océanos Pacífico y Atlántico gracias a sus 2.700 kilómetros, de los que más de 1.500 se encuentran en Bolivia. La construcción de esta carretera ha sido posible gracias a un acuerdo firmado en 2007 por las autoridades de Brasil, Bolivia y Chile.
DISPUTAS
En los últimos meses, la tensión entre Santiago y La Paz ha aumentado a cuenta del conflicto fronterizo y la detención de tres soldados bolivianos a finales de enero en Chile, cerca de la frontera de Bolivia. Tras 32 días de enfrentamientos verbales, finalmente el pasado viernes los tres soldados acordaron con la Fiscalía chilena suspender el proceso judicial a cambio de que abandonaran el país sudamericano en 24 horas y de que no regresaran allí en un año.
Además, ambos países mantienen una disputa territorial desde 1879, cuando Bolivia perdió su salida al Pacífico tras la guerra que mantuvo con Chile, que culminó con el Tratado de Paz y Amistad de 1904, sobre el derecho de libre tránsito de mercancías bolivianas hacia y desde puertos en el océano.
Chile asegura que con el acuerdo de paz --que fue ratificado por los parlamentos de ambos países veinte años después-- se establecen las fronteras --también las marítimas-- de las naciones combatientes, por lo que no ha lugar ninguna disputa territorial.