Actualizado 11/03/2006 21:58

Bolivia/España.- Continúa el juicio contra el empresario sevillano Javier Villanueva, que concluirá el lunes

LA PAZ, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

El abogado del empresario español, Javier Villanueva, quien se enfrenta a 30 años de prisión en Bolivia por su presunta implicación en el asesinato de la fiscal antidroga Mónica Von Borries con un coche-bomba, continuó hoy la exposición de sus conclusiones el juicio contra el sevillano, qué, tras un receso, concluirá el lunes.

En declaraciones a Europa Press, Javier Villanueva afirmó hoy que la defensa actuó de un modo "contundente y categórico" para desmontar lo que él considera que es una "conspiración" en la que él es el "chivo expiatorio". En este sentido declaró que su abogado puso sobre la mesa "muchísimas pruebas que demuestran que no pertenezco a ninguna banda y que no pude participar en el asesinato".

Asimismo, Villanueva se mostró "complacido" por el hecho de que la prensa boliviana "se esté volviendo un poco más imparcial" a la vista de la actuación de su abogado, complacencia que justificó asegurando que los titulares de varios periódicos del país suramericano abrieron hoy con titulares que afirmaban que "la defensa derrumbó todas las pruebas de acusación del caso".

Según el sevillano, la defensa siguió explicando quién era Diodato, un ex policía qué trabajó para el Gobierno boliviano en numerosas ocasiones y el supuesto líder de la banda que asesinó a la fiscal, Marco Marino Diodato, que, según el abogado de Villanueva, no se encuentra fugado, sino que fue asesinado por la Embajada estadounidense.

Asimismo, ayer expusieron sus conclusiones los abogados de otro de los acusados, el brasileño Ricardo Borba, y el boliviano Freddy Hurtado. El abogado de Borba "parecía un fiscal más", aseguró el empresario sevillano, puesto que corroboró todo lo que dice el Ministerio Público, y por otra parte, trató de hacer ver a Borba "como una buena persona". "Una persona con antecedentes en Brasil por narcotráfico, robo a mano armada" y otros delitos "no puede ser buena persona", explicó el empresario, quien señaló que la defensa trató de hacer ver estas cualidades en el brasileño alegando que este pensaba que no iban a cometer una atentado contra Von Borries, sino que se trataba de un secuestro, "y eso no causa daño", explicó.

Por su parte, la defensa del otro acusado, Freddy Hurtado, expuso en sus conclusiones que este "no tiene nada que ver" en el atentado, y que sólo prestó una furgoneta a un amigo "y no tenía porqué saber qué iba a hacer este con el vehículo".

Villanueva, que calificó el proceso como "fabricado de una manera vil", pidió ayer la intervención del Gobierno español en su causa para que el proceso judicial se resuelva con un fallo "justo", ya que, a su entender, la vista oral no lo está siendo y se ve "sentenciado". Así lo explicó precisando que la petición la realizó formalmente su padre, Francisco Villanueva, ante la Embajada española en Bolivia, porque se siente "totalmente indefenso".

El coronel Torrico, jefe de la Policía que le custodia, dijo que Villanueva ha tratado mal a los agentes que le custodian. "Dijo que les insulto, cuando en realidad les doy de comer". Por ello, ahora está custodiado por 30 policías armados, en lugar de 12 como hasta ahora. "Dicen que me quiero fugar, que tengo una avioneta preparada. Hoy me han llevado esposado al Tribunal, violando con ello la Ley porque estoy en libertad, no preso. Estoy en una indefensión absoluta", lamentó.

Ante tal situación, se preguntó el motivo por el que pretenden "hacer creer que soy peligroso" y criticó que los policías entran a molestarle incluso de madrugada, invadiendo su intimidad, y no permiten que la prensa vaya a verle, argumentando que una resolución judicial lo prohíbe, algo que desmintió categóricamente. Por todo ello, aseveró que siente que ya está "sentenciado porque los jueces están permitiendo que se me trate mal". Para el empresario hispalense, su situación parece estar sometida a un "estado policial. Es una dictadura camuflada".

En este clima, durante la vista oral de ayer se expusieron las conclusiones del Ministerio Fiscal, que ya el lunes reconoció ante la Corte Cuarta de lo Penal de Santa Cruz (Bolivia) que "nadie pudo ver" al empresario colocando la bomba. En contraposición, siempre según Villanueva, que los testigos del empresario mintieron, destacando además que es "hijo de padres divorciados y un tipo violento".

Además, el empresario aseguró que el fiscal mintió en las horas que aportó, mientras "sí defendió a Ricardo Borba --otro de los inculpados--, diciendo que es inmaculado, cuando en realidad sí tiene antecedentes en Brasil. Y sostuvo que Borba no cambió su versión de los hechos".

El pasado lunes, el fiscal dijo también que "en España hay preparación" para estos actos terroristas, "que estamos acostumbrados", a diferencia de lo que ocurre en Bolivia. También esgrimió que las empresas que regenta el sevillano son "papel, que quería atentar para conseguir dinero para resurgir en el mundo empresarial".