Actualizado 19/12/2006 18:21

Bolivia.-Evo Morales anuncia la ampliación de la superficie de cultivo permitido de hoja de coca en ocho mil hectáreas


LA PAZ, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -

Bolivia dispondrá, mediante decreto, de ocho mil hectáreas más de cultivo de hoja de coca, con lo que la superficie destinada alcanzará las 20 mil hectáreas. Así lo comunicó ayer el presidente de ese país, Evo Morales en un reunión con campesinos. Además, indicó que pedirá la cooperación internacional en este sentido y que recuperará el cato de coca, que consiste en una extensión de 40 por 40 metros para ese cultivo por campesino.

Según la legislación vigente, de acuerdo a la Ley 1008 no se puede tener más de 12 mil hectáreas, pero Morales se comprometió a no excederse de las 20 mil hasta el 2010. El anuncio se produjo anoche en la presentación de una nueva estrategia para la lucha contra el narcotráfico para el próximo trienio, que tuvo lugar en el campamento de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), cerca de la localidad de Chimoré, a 200 kilómetros de Cochabamba, según informa el diario boliviano 'La Razón'.

En 2004 el presidente de turno, Carlos Mesa acordó con Morales, quien inicialmente apoyó a ese Gobierno, la ampliación por decreto de 3.200 hectáreas --en total 15.200-- a la espera de un estudio para determinar los verdaderos niveles de demanda legal, y no para la producción de cocaína; sin embargo dicho estudio no ha sido realizado aún en Bolivia.

Morales dijo que la coca excedente será utilizada para procesar la hoja y convertirla en manufacturas como infusión empaquetada con efectos medicinales.

"Si como Gobierno nos comprometemos a tener menos de 20 mil hectáreas de coca, imposible comprometernos a algo que no vamos a cumplir con el pueblo o con la comunidad internacional. Lamento mucho, un problema importado por el cual tenemos que pagar. Ahora no queremos que ese problema se profundice, en especial en el tema de consumo", dijo Morales a los embajadores y autoridades extranjeras invitadas a dicha presentación.

"En los últimos años, en Bolivia intentaron hacer respetar la Ley 1008, jamás pudieron, intentaron cero de coca, en cinco años y no hubo aquello... Son normas a veces equivocadas impuestas desde arriba, desde afuera, que no concuerdan con la realidad y la vivencia de los bolivianos y esas normas deben ser corregidas, la erradicación con compensación fue un rotundo fracaso, la erradicación con militarización otro fracaso", explicó el presidente.

Sobre la legalización del cato de coca indicó que hay que respetarlo. "Si esto se hubiera resuelto y entendido, estoy seguro que no hubiera habido tantas confrontaciones en años pasados, y este avance, en todo caso, hay que legalizar, se va a legalizar, no tengo ningún problema, pero quiero el compromiso de parte de los compañeros dirigentes que se respete el cato de coca", añadió Morales.

El embajador estadounidense en Bolivia, Philip Goldberg, advirtió desde su llegada en septiembre que Estados Unidos está cada vez más preocupado por el incremento de los cultivos "ilegales", pues tiene la seguridad de que más del 90 por ciento de ellos van a la producción de cocaína.

"Bolivia propone llegar a un resultado realista de manera sostenible sobre la base del control social de los cultivos y de su extensión, y sin violación a los derechos humanos". También explica que a diciembre del 2005, el país tuvo 25.400 hectáreas de cultivos de coca, con unas 13.400 hectáreas por encima de la actual ley", indicó Morales.

El mandatario reiteró "no habrá coca cero, pero sí cocaína cero" en Bolivia. Además Morales pidió un esfuerzo mayor de la comunidad internacional para reducir la demanda de cocaína en los países al tiempo que ensalzó las bondades de la coca. "No podemos ignorar o descartar que la coca no se puede industrializar, revaloricemos la hoja de coca". La reducción voluntaria de coca fue de 5.070 hectáreas, de acuerdo a la legislación vigente.

A la presentación asistieron el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, la ministra de Gobierno, Alicia Muñoz, el comandante de las Fuerzas Armadas, Wilfredo Vargas, el comandante de la Fuerza Especial de Lucha Contra las Drogas, el coronel Luis Vásquez. Además también estuvieron presentes los embajadores de Cuba, de Ecuador, de China, de la Unión Europea.