Actualizado 10/01/2011 20:54

Bolivia.- El Gobierno de Morales admite el deterioro de su imagen tras el 'gasolinazo'

LA PAZ, 10 Ene. (Reuters/EP) -

El Gobierno de Evo Morales reconoció este lunes el impacto negativo que tuvo en su imagen el intento de aumentar el precio en un 83% de los combustibles a finales de 2010, conocido como 'el gasolinazo', que desató un violento rechazo entre la población por lo que el presidente tuvo que retirar la medida cinco días después de aprobarla.

Según destaca una encuesta de la firma privada local Captura Consulting, aunque el mandatario posee una aprobación del 67 por ciento, su deterioro es pasajero pues su popularidad es alta en poblaciones rurales.

"Es cierto que el tema de la nivelación de los precios de los combustibles líquidos ha generado descontento y nos afecta a la imagen", según afirmó el portavoz de la Presidencia de Bolivia, Iván Canelas, que destacó que había que diferenciar entre la imagen gubernamental y la popularidad del presidente.

El alza de hasta un 83 por ciento en los precios de los combustibles desató violentas protestas en varias ciudades que forzaron al Gobierno a dar marcha atrás y anular la medida el 31 de diciembre, sólo cinco días después de su entrada en vigor.

El sondeo publicado por el diario boliviano 'El Deber' es "sólo un referente comunicacional", dijo Canelas, remarcando que fue llevado a cabo entre el 4 y el 7 de enero, cuando Bolivia vivía todavía una ola de alzas descontroladas en los precios de los transporte y de los alimentos.

El diario no publicó datos comparativos de estudios similares anteriores, pero mencionó que una encuesta mayor de otra firma privada, Ipsos Apoyo, dio a Morales una aprobación de 54 por ciento a principios de diciembre pasado.

Morales, seguidor del presidente venezolano, Hugo Chávez y del ex mandatario cubano Fidel Castro, impulsa un proceso de cambios de línea socialista e indígena. Por ello, mantiene índices de aprobación en casi todos los sondeos publicados en los cinco últimos años, con picos de más del 80 por ciento.

En declaraciones publicadas por el diario 'La Razón', el vicepresidente boliviano, Alvaro García, dijo que el empeoramiento de la imagen oficial ha sido consecuencia del 'gasolinazo', pero minimizó el hecho con el argumento de que "un Gobierno responsable no se está cuidando la imagen en el espejo".

El supuesto deterioro de la imagen del Gobierno, y de Morales en particular, "es un argumento que se utiliza como una sonajera con una regularidad de seis a ocho meses desde el 2006", agregó García.

Morales prometió acordar un eventual futuro 'gasolinazo' con los movimientos sociales que son la base de su respaldo político.