Actualizado 07/02/2006 02:07

Bolivia.- Javier Villanueva califica de "vergonzosa" la segunda sesión de la vista oral en la Corte de Santa Cruz

Dice que los jueces criticaron a los medios españoles y al Gobierno español por "injerencia" en asuntos de la Justicia boliviana


MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -

El empresario español, Javier Villanueva, que se enfrenta desde ayer, lunes, a una petición de la Fiscalía de Santa Cruz (Bolivia) de 30 años de prisión por el presunto asesinato de la fiscal antidroga Mónica Von Borries, calificó hoy de "vergonzosa" la segunda sesión de la vista oral, por la actitud mostrada por los jueces de la Corte Superior de Justicia de Santa Cruz durante el desarrollo de la misma.

En declaraciones a Europa Press, Villanueva denunció que los magistrados del alto tribunal cruceño le acusaron "sin ninguna argumentación ni pruebas" de ayudar a uno de los presos de la cárcel de Palmasola, donde estuvo recluido 18 meses, a escapar del penal y de realizar comercios ilícitos, sin especificar el tipo de actividad a la que se hacía alusión.

Asimismo, explicó que los jueces criticaron a los medios españoles y al Gobierno español, incluso al presidente José Luis Rodríguez Zapatero, por "injerencia" en los asuntos de la Justicia boliviana. Los magistrados arremetieron además contra la presencia del Cónsul de España, José Fernández Nortes, en los pasillos del Palacio de Justicia, por considerarlo "una intromisión en temas que sólo corresponden a los bolivianos", según declaró el fiscal Joadel Bravo.

El sevillano, que se encuentra desde hace 20 meses privado de libertad sin una sentencia en su contra, aseguró que los fiscales declararon que "los tratados internacionales no tienen ningún valor para la Justicia" del país iberoamericano. Según explicó, los convenios internacionales dicen que "todo extranjero que sea investigado tiene que ser informado a su cónsul para que tenga validez". En el caso contrario, "todo el juicio quedaría anulado, por lo que la Fiscalía quiere dictaminar una sentencia en contra de estas convenciones, firmadas por Bolivia", apuntó.

Villanueva criticó, igualmente, la presencia de la hija de la fiscal antidrogas, de 13 años, junto a sus abuelos en el banco de la acusación en la segunda sesión del juicio. En este contexto, el sevillano sostuvo que, ante la ausencia de pruebas, "la acusación ha tenido que agarrarse a llevar a la familia y poner a la hija al lado de los fiscales para dar pena al tribunal ciudadano".

EN LIBERTAD CONDICIONAL

El juicio de Villanueva tuvo que ser aplazado tras la recusación del tribunal ciudadano --jurado popular-- llevada a cabo por la defensa de éste. El sevillano se encuentra recluido, en régimen de libertad condicional, en un domicilio de la localidad, después de que el Tribunal Cuarto de Sentencia de la Corte decidiera el 4 de noviembre de 2005 darle el permiso para salir del penal de Palmasola como consecuencia del recurso entregado por su letrado, Santiago Flores, al cumplirse el período temporal máximo de 18 meses de encarcelamiento legal sin que se hubiera llevado a cabo vista oral.

Al sevillano se le acusa de pertenecer a una organización criminal liderada por el italiano Marco Marino Diodato. A pesar de reiterar su inocencia, admitió su culpabilidad tras ser sometido a torturas y vejaciones, según sigue sosteniendo la familia. La Oficina del Defensor del Pueblo de Bolivia, Waldo Albarracín, publicó un informe a principios de julio de 2004 que reconocía irregularidades en el proceso de encarcelamiento del sevillano, como que estuvo perdido durante cuatro horas desde su detención y que el médico de la prisión en la que está encarcelado detectó síntomas de tortura en su cuerpo.

El Tribunal Cuarto de Sentencia de Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) denegó a principios de febrero de 2005 la libertad provisional al sevillano después de que los jueces argumentaran que "necesariamente" debía tener familia residente en el país andino, por lo que permanece en situación de detención preventiva en la prisión de Palmasola.

El joven sevillano obtuvo a mediados de octubre de 2004 una anterior negativa en la audiencia ya que el juzgado entendió que había riesgo de fuga y no le concedió la libertad solicitada a través de su representante legal.